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viernes, 4 de septiembre de 2020

Operación Océano



Por William Moreno:
La Operación Océano ya comenzó a hacer un poco de agua, con “chicanas”, grandes o chicas, pero chicanas al fin, por parte de los defensores de los acusados. Esperemos que no sea como el Titanic, que se hundió casi sin dejar rastros.  Un diario, decía que en el Tribunal de Justicia se dio cita la crem de la crem de los estudios y abogados.


Si de esos que no se pagan con dos pesos con cincuenta. Ahí corre mucho dinero, no son abogados para los roba gallina, son para gente de alto poder económico. Porque la “operación océano” dio a luz un sub mundo donde el lujo, el dinero, la corrupción, la droga junto a la “carne fresca”, corre como el agua. Es algo que todos sabemos que está ahí, pero jamás, nadie o casi nadie le pudo hincar el diente.

Seguro que es muy difícil, porque ahí, en esos investigados, aparece el poder político y el poder de don dinero. Hombres de cincuenta años para arriba, que son políticos, jueces, dueños de locales nocturnos, organizadores de eventos, dueños de yates y con familias a sus espaldas. Hasta podriamos decir que por el día son “hombres respetables”, pero que cuando se esconde el sol se transforman, como lo hacía dracula. 
 
Por el otro lado están las jóvenes acusadoras, jóvenes que vienen del mundo opuesto, es decir donde la carencia es casi total.  Si es total: en dineros para alcanzar en ocasiones la comida diaria, en las mas los zapatos caros y ropas de marca de muy difícil acceso para estas jóvenes, el viaje en yate, la concurrencia a eventos caros, muy caros. Niñas y jóvenes con mucha TV y poco afecto familiar, y porque han dejado de estudiar, eso sería un denominador común en la vida de la parte acusatoria. 

Para lo que se mueve en el entorno, esto se asemejaría a un tornado jamás visto en el Uruguay.  Si ese entorno de las 32 personas procesadas por la justicia, pero cuyos nombres aun en forma oficial nada sabemos.  Mueve mucho poder e influencia, política, social, económica, cuyas conexiones con los medios de comunicación son inimaginables.  Pero no es solo donde están los potentados con casas, yates, apartamentos y muy buen pasar en Punta del Este.

Eso como símbolo de poder económico. Porque al parecer en este país, muchas cosas las descubrimos por casualidad, por olfato de los iluminados, NO porque investiguemos, eso que les pasa a los más débiles y desprotegidos de la sociedad. Luego tenemos el gran problema, el olvido de algunos temas sin decirle al resto de la ciudadanía, lo que realmente paso, o sea el resultado de investigación.  Nos olvidamos de lo que paso, en la Terminal del Cerro, nos olvidamos de la violación cometidas por cinco integrantes de la armada nacional que violaron y grabaron a un joven en Haití, nos olvidamos de lo que paso con los cinco jóvenes que aparecieron muertos en Cerro Largo y nos seguimos olvidando.

Por un lado, porque así es la mente humana, por otro por la “protección” que dan algunos medios de comunicación a sus “lectores”.  No sabemos, o tal vez no sepamos, o no queremos saber por qué en los medios de comunicación, se escribe o habla tan poco sobre la Operación Océano. ¿Por qué será?  Aun después de meses, casi un año NO se puede, o no se quiere dar a conocer los nombres de esta “gente”, violadores de menores, por el solo hecho de tener dinero y poder social y político, piensan que pueden realizar lo que se les antoje con menores.  Y aquí podríamos decir que viene la pregunta del millón: ¿Dónde están o que se hicieron los organismos del estado que deberían de defender a nuestros niños y niñas?

  Esto podríamos decir que es solo una gota de agua en un inmenso océano. Pues a raíz de todo esto y a través de denuncias anónimas comenzaron a ver a luz decena de hechos, que en algunos casos no son tan nuevos tienen año de denunciados y fueron mal o muy lentamente investigados. El más comentado podemos decir que es el carnaval de las promesas, sin olvidarnos el futbol de los niños.  Hay quien sostiene que sobre la mesa de trabajo de la fiscal Viera más de 600 denuncias de casos que estarían en la fase de investigación….

Seguro que una de las preguntas a realizarse es saber, porque comenzaron a fluir denuncias contra esta Fiscal, por su mal trabajo, es decir presentar mal las pruebas. Aquí vemos que las chicanas o miradas con lupa son muchas.  Pero nadie se pregunta, quienes son los responsables que estas jóvenes, con hombres adultos entraran en hoteles y/o casas de citas, pues ahí, tienen la obligación de pedir documentos.

Hoy día estamos aún en pleno invierno, por lo tanto, hace aún mucho frio en las calles. Cuando venga el calorcito le sugerimos a quien corresponda, salir a recorrer las calles: como Avenida Italia, Batlle y Ordoñez, Léxica, Garzón, las terminales de ómnibus, podría seguir, pues por esos lares se las puede ver ofreciendo sus cuerpos.   Un olvido, pero no tan olvido, son esos comentarios que han aparecido, que, si los violadores les pagaran o realizaran una transacción económica con las violadas, hasta se podría levantar las denuncias. ¿Sera tan así?

marinoasentamiento670@hotmail.com

domingo, 15 de marzo de 2020

Trump aplica las mentiras para invadir a Venezuela



Por Diego Olivera Evia: 
La farsa de EEUU al atacar a Venezuela, Cuba y Nicaragua

Desde Barómetro Internacional consideramos que EE.UU. y el Comando Sur buscan crear una división en América Latina. "Ellos hablan de proteger a sus socios (…) pero la realidad muestra que esto es una hipocresía. Todo el tiempo están atacando a Venezuela y Cuba, tratando de crear presiones sobre ellas", quien es considerado que los apoyos de Trump en Latinoamerica son, una farsa y solo se alimenta con el terrorismo y "todos grupos de la ultraderecha”.


Y la verdad de las acciones violentas en los países sudamericanos, la mentira de la  OEA, con crímenes de lesa humanidad como esta pasando en Chile, como decenas de heridos y asesinados, violaciones de mujeres y niñas, por los Carabineros una policía militar fascista, apoyadas por el golpe de estado contra el presidente Allende, la acciones terroristas ha determinado las luchas sociales y la marchas, exigiendo una nueva constitución y los derechos humanos, y la Señora Bachelet, revisa a Venezuela y desconoce el gobierno de Piñera asesino confeso.

La pregunta que nos asemos cual es la postura de la Organización Naciones Unidas (ONU), que permite los abusos y los crímenes, como en Bolivia con el golpe de estado, han creado masacres con los pueblos indígenas,  a través del ejército y la policía impusieron a la inmoral Yáñez inmoral y dueña de prostíbulos, y ahora con conexos con la droga Colombia, mintieron con la ONU, bajo la inmoralidad de el Secretario Luis Al mugre, ahora apoyado por el nuevo presidente Luis Lacalle, de frentista a agente de la CIA, esta es una verdad grave para Uruguay. 

Trump y los presidentes de derecha y neoliberales  corruptos
En ese sentido EE.UU. incrementará su presencia militar en América Latina "para finales de año" Según el jefe del Comando Sur de EE.UU., almirante Craig Faller, la medida incluirá más barcos, aviones y fuerzas de seguridad. Según el jefe del Comando Sur de EE.UU., almirante Craig Faller, la medida incluirá más barcos, aviones y fuerzas de seguridad. A la par, el jefe del Comando Sur denunció que mientras Rusia, China y Cuba "colaboran" con el gobierno de Venezuela, "las democracias del mundo buscan una forma de conseguirle al pueblo venezolano lo que se merece: una economía libre y próspera".

De acuerdo con el gobierno venezolano, las sanciones unilaterales que EE.UU. ha impuesto contra Caracas en los últimos años causado pérdidas al país suramericano por el orden de los 40.000 millones de dólares. Por esa razón, el presidente Nicolás Maduro ha interpuesto una demanda contra Washington ante la Corte Penal Internacional por "crímenes de lesa humanidad".

No obstante, las declaraciones de Faller surgen tras la reunión que sostuvo el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, con el gobierno de EE.UU. el pasado domingo, cuando firmaron un acuerdo de cooperación militar "estratégico". De hecho, el jefe del Comando Sur calificó de "histórico" el pacto suscrito, pues supuestamente fortalecerá "la defensa" de la región "contra las amenazas".

En ese sentido días atrás, Maduro alertó que EE. UU buscaba empujar a Brasil a un conflicto armado contra Venezuela. "Le pedimos a los sectores democráticos, humanistas, al pueblo de Brasil y a las fuerzas militares, que detengan cualquier aventura de Jair Bolsonaro, en coordinación con Donald Trump". Según el mandatario venezolano, Bolsonaro, "fue citado en la mansión de Donald Trump, en Miami" para debatir sobre Venezuela "como único tema" en la agenda.

"Desde la Casa Blanca se ha decidido un plan para traer la guerra, el terrorismo, para desestabilizar y llenar de violencia a Venezuela, para escalar un conflicto armado y justificar una intervención militar a nuestro país", denunció el mandatario venezolano.

Nos parece importante establecer una premisa, sobre el uso del poderío militar de EEUU, es intentar subyugar a los países de América Latina, en el marco de los ataques a Venezuela y Cuba, muestra un ataque a Nicaragua en las próximas elecciones en Managua, de la misma manera el imperio ataca al presidente de México AMLO, por haber logrado avances sociales, los ataques a los carteles de la droga, el ataque a la corrupción de los presidentes del PRI y de otros grupos de derecha, la misma resistencia del presidente mexicano a EEUU y la defensa a Venezuela y Cuba, como a los grupos criminales de México.

Periodista, Historiador y Analista Internacional
diegojolivera@gmail.com

sábado, 7 de marzo de 2020

El capitalismo y las trasnacionales destruyen a la humanidad


Por Diego Olivera Evia:
Las guerras, la droga, el hambre en el Siglo XXI

La sociedad humana avanza hacia una crisis global, en el marco del capitalismo, el resurgimiento del fascismo en Europa y América Latina, impulsado por el modelo imperial de EEUU, con la presidencia del magnate Donald Trump, que ha impuesto sus reglas del juego, logrando controlar a la Unión Europea (UE), como a la OTAN el brazo militar de la UE, en ese mismo sentido aplica mecanismos, para intentar controlar a la Organización de Estados Americanos (OEA).


Creando mecanismos coercitivos, en una guerra sin cuartel contra Venezuela, pero estas acciones no han podido lograr una mayoría, para agredir a Venezuela y apoderar un gobierno de facto en esta nación sudamericana, la imposición de un títere de la Asamblea Nacional (AN), en desacato, ha generado una grave crisis, donde el petróleo, el Oro, el Coltán, las refinerías de CITGO, de propiedad venezolana, son la base de una guerra imperial y sin escrúpulos.

Un informe de la CELAC advertía los posibles efectos del modelo gringo desde las promesas de campaña y a partir de la (inesperada) asunción al Gobierno de Donald Trump suenan las alarmas sobre un “retorno al proteccionismo” en Estados Unidos (EE. UU.) como amenaza al orden global neoliberal. Se ha renovado la discusión liberalismo-proteccionismo desde una postura hegemónica que plantea ambas alternativas como contradictorias y en la que el proteccionismo sería un lastre del “populismo de derecha” de Trump que atenta contra los logros del neoliberalismo a nivel internacional. Así, desde la prensa hegemónica -que se hace eco de las voces expertas más calificadas- se viene advirtiendo sobre los perjuicios de los lineamientos proteccionistas impulsados por el Gobierno, en particular, los efectos en la economía y geopolítica internacional y, también, para América Latina y el Caribe (ALC).

Sin embargo, hay poca información concreta sobre cuál es el impacto en inversiones y relaciones comerciales con la región, donde las políticas de Trump, paradójicamente, parecen haber profundizado el neoliberalismo por la vía de la expansión de las transnacionales estadounidenses. Además, más allá de si el proteccionismo es “bueno o malo”, los resultados de los lineamientos implementados parecen haber abierto un nuevo ciclo de crisis en la economía de EE.UU., a la vez que están causando un impacto significativo en la geopolítica internacional. Lo que no está tan claro es que se trate de medidas que amenacen la supervivencia del neoliberalismo.

A continuación, expondremos qué es el “proteccionismo à la Trump” (una cosa es lo que se dice, otra es lo que se decide y otra diferente, lo que se logra), dimensionando, en primer lugar, sus efectos en EE. UU. para, en un segundo momento, abordar su impacto en las relaciones con ALC

Las guerras, la droga, el hambre, en el Siglo XXI
En este marco de crisis de guerras monopólicas contra África, Medio Oriente, Asia, América Latina, son avasalladas por la políticas neo coloniales, la sumisión de países latinoamericanos a las presiones de Trump, y su equipo de guerra global, han podido usar a presidentes fascistas e inmorales, como Macri, Bolsonaro, Piñera, Duque, que aplican políticas neoliberales en sus naciones, el ataque al Amazonas, por Bolsonaro, para entregar sus recursos a las trasnacionales, crearía un ataque brutal el ecosistema. Pero lo más peligroso es el ataque a los pueblos originales del pulmón de Sudamérica, donde un militar fascista como el presidente brasileño, considera a estos pueblos, como ignorantes, sucios y que nos hablan portugués, al mejor estilo de la conquista, de los españoles, portugueses e ingleses, que asesinaron a millones de seres humanos.

Otros efectos como las drogas son parte de la acción de EEUU, el principal consumidor de estupefacientes del planeta, la inmoralidad de los gobiernos de Colombia, han creado el mayor imperio de la droga, controlado por presidentes corruptos, el mismo presidente Duque, es parte de la familia de los carteles de la Droga. Siendo Uribe señalado de participar habitualmente en el diseño y ejecución de matanzas perpetradas por los paramilitares colombianos, como el caso de la Matanza de El Aro cometida en 1997.

En esa, según relata el periódico de Miami, El Nuevo Herald informo que, el mismísimo Álvaro Uribe, planeo la matanza con los dirigentes de las Autodefensa Unidas de Colombia y posteriormente acudió personalmente a felicitar a los paramilitares que “brillantemente” habían asesinado, con motosierras, al menos a 15 campesinos indefensos, matanza por la que la Corte Interamericana de Derechos Humanos condenó a Colombia.

Tres parientes del ex presidente colombiano, entre ellos dos primos hermanos, lideraron una banda paramilitar conocida como Los Erre, señalada de haber asesinado a medio centenar de personas en varios municipios del departamento de Antioquia: Carlos Alberto Vélez Ochoa, Juan Diego Vélez Ochoa y Mario Vélez Ochoa, quienes también son familiares del clan de los capos del narcotráfico Ochoa.

La política de Seguridad Democrática de Álvaro Uribe dio lugar al escándalo conocido como falsos positivos, el asesinato de al menos 2 mil 500 civiles inocentes por la fuerza pública colombiana – bajo el mandato de Uribe como presidente y siendo Juan Manuel Santos el Ministro de Defensa – presentados como, guerrilleros dados de baja en combate

En mayo de 2010, el diario The Washington Post, publica la confesión del policía Juan Carlos Meneses, de haber asesinado a miles de campesinos y realizar múltiples operaciones paramilitares junto a Los 12 apóstoles, grupo paramilitar en el que participa Santiago Uribe, hermano de Álvaro.

Esta es la realidad de un modelo capitalista sin escrúpulos, que aplica las políticas de violencia, guerra, habla de ayudas humanitarias, pero en realidad invaden naciones, para adueñarse de los principales recursos, petróleo, oro, minerales, esclaviza a pueblos de África y Asia, para ampliar el papel de las trasnacionales y ampliar el papel El complejo industrial-militar (una de las principales fuentes de empleo en EE. UU).

Esta es la realidad de un modelo criminal, que, en el marco del Grupo de Lima, reorganizada por Trump, como un mecanismo de coerción sobre Venezuela, Cuba y Nicaragua, el interés de EEUU es controlar a América Latina.

Una nueva realidad en Uruguay
Y ahora en Uruguay el neoliberalismo y el fascismo, se ha manifestado en mentiras, el mismo presidente Lacalle mintió sobres los aumentos de la luz, el agua, la gasolina, el gas familiar, el aumento del dólar de 39 a 43 el costo del peso uruguayo, creando a los ciudadanos ajustes y aumentando los insumos de a los alimentos, como otras medidas para incrementar una crisis en las mayorías de los ciudadanos uruguayos.

También han creado otros mecanismo de coerción, al   aplican la violencia de la policía y la metropolitana, contra los jóvenes estudiantes, los indigentes, a los cuidadores de autos en la calle y acusan a los malabaristas como un peligro, bajo la amenaza de detención y con violencia, a través de las políticas del Ministro del Interior Jorge Larrañaga, quien amenaza al Frente Amplio (FA), como desconociendo a los diputados y senadores, quienes quieren evitar la violencia en la sociedad, y los policías y el Ministerio del Interior, a través de un  modelo de abuso  sobre los sectores marginales de la sociedad.

 Periodista, Historiador y Analista Internacional
diegojolivera@gmail.com

domingo, 10 de noviembre de 2019

El capitalismo destruye la sociedad humana y las naciones



Por Diego Olivera Evia:
Las guerras, la droga y el hambre en el Siglo XXI 

La sociedad humana avanza hacia una crisis global, en el marco del capitalismo, el resurgimiento del fascismo en Europa y América Latina, impulsado por el modelo imperial de EEUU, con la presidencia del magnate Donald Trump, que ha impuesto sus reglas del juego, logrando controlar a la Unión Europea (UE), como a la OTAN el brazo militar de la UE, en ese mismo sentido aplica mecanismos, para intentar controlar a la Organización de Estados Americanos (OEA), creando una crisis en América Latina, con el Grupo de Lima, usando a Colombia contra Venezuela, Cuba, Nicaragua, ahora con Bolivia, contra el triunfo de Evo Morales, de la misma manera los cambios en Argentina, con la derrota de Macri, y la grave situación en Chile, con una nueva dictadura, con asesinatos, violaciones a mujeres y hombres, pero el pueblo no deja las calles, busca una nueva constitución, para derogar la de Pinochet, esta situaciones son parte de la crisis y el terrorismo de Trump. 


Creando mecanismos coercitivos, de los miembros, pero en una guerra sin cuartel contra Venezuela, pero no han podido lograr mayoría, para agredir a Venezuela y apoderar un gobierno de facto en esta nación sudamericana, la imposición de un títere de la Asamblea Nacional (AN), en desacato, ha generado una grave crisis, donde el petróleo, el Oro, el Coltán, las refinerías de CITGO, de propiedad venezolana, son la base de una guerra imperial y sin escrúpulos.

Un informe de la CELAC advertía los posibles efectos del modelo de EEUU, desde las promesas de campañas y a partir de la (inesperada) a través del Gobierno de Donald Trump, pero suenan las alarmas sobre un “retorno al proteccionismo” en Estados Unidos (EE.UU.) como amenaza al orden global neoliberal. Se ha renovado la discusión liberalismo-proteccionismo desde una postura hegemónica que plantea ambas alternativas como contradictorias y en la que el proteccionismo sería un lastre del “populismo de derecha” de Trump que atenta contra los logros del neoliberalismo a nivel internacional. Así, desde la prensa hegemónica -que se hace eco de las voces expertas más calificadas- se viene advirtiendo sobre los perjuicios de los lineamientos proteccionistas impulsados por el Gobierno, en particular, los efectos en la economía y geopolítica internacional y, también, para América Latina y el Caribe (ALC).

Sin embargo, hay poca información concreta sobre cuál es el impacto en inversiones y relaciones comerciales con la región, donde las políticas de Trump, paradójicamente, parecen haber profundizado el neoliberalismo por la vía de la expansión de las transnacionales estadounidenses. Además, más allá de si el proteccionismo es “bueno o malo”, los resultados de los lineamientos implementados parecen haber abierto un nuevo ciclo de crisis en la economía de EE.UU., a la vez que están causando un impacto significativo en la geopolítica internacional. Lo que no está tan claro es que se trate de medidas que amenacen la supervivencia del neoliberalismo.

Proteccionismo a lo Trump en EE.UU.

Trump ha demostrado que EE. UU. auguraba, para la mayoría de analistas, un menor ritmo de comercio y de inversiones con la región. En efecto, varios factores parecían conjugarse en este sentido: la suspensión de acuerdos, como el Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP), que contemplaban la reducción de barreras no arancelarias, la armonización regulatoria y la creación de nuevos estándares para regular el comercio digital; la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN); la idea de renegociar, también, acuerdos bilaterales con otros países como Chile, Colombia, Panamá y Perú, entre otros; las críticas a la OMC por favorecer el libre comercio; y la apuesta por la relocalización de la producción de las empresas estadounidenses hacia EE.UU. Sin embargo, hasta el momento, no se ha verificado esta tendencia.

El “América First”, que prometía generar empleo e impulsar la industria nacional, volver al “made in América” vs. el “made in China”, ha mostrado escasos resultados. No parece haberse conseguido un aumento en la competitividad de las industrias locales, pues la mayoría está atada a una cadena de producción invariablemente internacional. A esto se suma la disminución de las ganancias en las industrias manufactureras de EE.UU., como la de producción de alimentos, bebidas y tabaco, las productoras de petróleo, carbón, químicos y otros productos durables que se fabrican en territorio estadounidense. En un análisis reciente se menciona que esa caída de las ganancias podría explicar la política proteccionista al interior y la política de libre mercado al exterior.

Sin embargo, esta merma no se observa en todos los sectores. El complejo industrial-militar (una de las principales fuentes de empleo en EE.UU.) sigue gozando de buena salud: la venta de armas de EE. UU. al mundo se incrementó en 2019 (en continuidad con la tendencia con los gobiernos de Obama y de acuerdo a lo prometido por Trump). El último ejercicio fiscal (octubre-septiembre 2019) cerró con la venta de poco más de 41.930 millones de dólares, un incremento del 24% con respecto al mismo periodo anterior.

Los departamentos de Defensa, Estado y Comercio plantean diferentes propuestas para mejorar y acelerar el proceso de ventas a otras naciones y, también, estimular el incremento de empleos en el sector. Según datos recientes, EE. UU. realiza el 57.9% de las transacciones mundiales de armamentos, y con América Latina las ventas rebasaron los 343 millones de dólares en 2016, destacando las compras de México (100.899 millones), Colombia (75.990 millones), Brasil (59.310 millones) y Chile (48.798).

A su vez, las políticas proteccionistas están generando una mayor expansión de las empresas EE. UU. al exterior, expansión que, tal como vienen operando desde hace décadas -si bien por un lado implica aumento de inversiones y puestos de trabajo- también es portadora de una serie de “condicionamientos” a las economías (sobre todo las periféricas), asociados a exenciones impositivas, fuerza de trabajo barata y condiciones laborales “flexibles”, etc. -cabe recordar que en esta tónica van las reformas laborales y previsionales de los gobiernos de derecha en Argentina y Brasil, por ejemplo-.Los factores por los cuales las políticas proteccionistas podrían generar mayor inversión de las empresas estadounidenses en el exterior son: ( el encarecimiento de los costos de producción derivado del incremento de aranceles para insumos de uso difundido, como acero y aluminio; la repatriación de capitales puede inducir a una apreciación del dólar que también atente contra la competitividad local y las políticas anti inmigratorias pueden atentar contra el “reclutamiento de cerebros” que realizan las empresas estadounidenses en todo el globo para desarrollar las tareas de innovación en su país.

Las guerras, la droga, el hambre, en el Siglo XXI

Otros efectos como las drogas son parte de la acción de EEUU, el principal consumidor de estupefacientes del planeta, la inmoralidad de los gobiernos de Colombia, han creado el mayor imperio de la droga, controlado por presidentes corruptos, el mismo presidente Duque, es parte de la familia de los carteles de la Droga. Uribe capo de la droga y de los paracos de participar habitualmente en el diseño y ejecución de matanzas perpetradas por los paramilitares colombianos, como el caso de la Matanza de El Aro cometida en 1997.

En esa, según relata el periódico de Miami, El Nuevo Herald en informo, que el mismísimo Álvaro Uribe, planeo la matanza con los dirigentes de las Autodefensa Unidas de Colombia y posteriormente acudió personalmente a felicitar a los paramilitares que “brillantemente” habían asesinado, con motosierras, al menos a 15 campesinos indefensos, matanza por la que la Corte Interamericana de Derechos Humanos condenó a Colombia.

Ahora en la actualidad del gobierno de Duque en Colombia, se mantienen la variables del terrorismo en Colombia, la muerte de luchadores sociales, el desplazamiento de los campesinos, los asesinatos de ex Farc son parte de las políticas de Uribe, como los ataques a Venezuela y los intentos de atentados al presidente Nicolas Maduro, los vínculos del terrorista Guaidó con los rastrojos, quedo al descubierto en corredores para las fechorías, del terrorismo impulsado por Trump, para intentar controlar el petróleo, el oro, el Coltán, la imposibilidad de derrotar al gobierno venezolano, ha creado una histeria del psicótico Donald Trump, no solo en Venezuela sino con Cuba, en su resistencia de más de 50 años, esta es la realidad de las guerras imperialistas contra los pueblos del mundo.

(*) Periodista, Historiador y analista internacional
diegojolivera@gmail.com

miércoles, 2 de octubre de 2019

El capitalismo destruye la sociedad humana y las naciones



Por Diego Olivera Evia:
Las guerras, la droga, el hambre en el Siglo XXI

La sociedad humana avanza hacia una crisis global, en el marco del capitalismo, el resurgimiento del fascismo en Europa y América Latina, impulsado por el modelo imperial de EEUU, con la presidencia del magnate Donald Trump, que ha impuesto sus reglas del juego, logrando controlar a la Unión Europea (UE), como a la OTAN el brazo militar de la UE, en es mismo sentido aplica mecanismos, para intentar controlar a la Organización de Estados Americanos (OEA). Creando mecanismos coercitivos, de los miembros, pero en una guerra sin cuartel contra Venezuela, pero no han podido lograr mayoría, para agredir a Venezuela y apoderar un gobierno de facto en esta nación sudamericana, la imposición de un títere de la Asamblea Nacional (AN), en desacato, ha generado una grave crisis, donde el petróleo, el Oro, el Coltán, las refinerías de CITGO, de propiedad venezolana, son la base de una guerra imperial y sin escrúpulos.


Un informe de la CELAC advertía los posibles efectos del modelo gringo desde las promesas de campaña y a partir de la (inesperada) asunción al Gobierno de Donald Trump suenan las alarmas sobre un “retorno al proteccionismo” en Estados Unidos (EE.UU.) como amenaza al orden global neoliberal. Se ha renovado la discusión liberalismo-proteccionismo desde una postura hegemónica que plantea ambas alternativas como contradictorias y en la que el proteccionismo sería un lastre del “populismo de derecha” de Trump que atenta contra los logros del neoliberalismo a nivel internacional. Así, desde la prensa hegemónica -que se hace eco de las voces expertas más calificadas- se viene advirtiendo sobre los perjuicios de los lineamientos proteccionistas impulsados por el Gobierno, en particular, los efectos en la economía y geopolítica internacional y, también, para América Latina y el Caribe (ALC).

Sin embargo, hay poca información concreta sobre cuál es el impacto en inversiones y relaciones comerciales con la región, donde las políticas de Trump, paradójicamente, parecen haber profundizado el neoliberalismo por la vía de la expansión de las transnacionales estadounidenses. Además, más allá de si el proteccionismo es “bueno o malo”, los resultados de los lineamientos implementados parecen haber abierto un nuevo ciclo de crisis en la economía de EE.UU., a la vez que están causando un impacto significativo en la geopolítica internacional. Lo que no está tan claro es que se trate de medidas que amenacen la supervivencia del neoliberalismo.

Proteccionismo a lo Trump en EE.UU.
La llegada de Trump a la presidencia de EE. UU. auguraba, para la mayoría de analistas, un menor ritmo de comercio y de inversiones con la región. En efecto, varios factores parecían conjugarse en este sentido: la suspensión de acuerdos, como el Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP), que contemplaban la reducción de barreras no arancelarias, la armonización regulatoria y la creación de nuevos estándares para regular el comercio digital; la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN); la idea de renegociar, también, acuerdos bilaterales con otros países como Chile, Colombia, Panamá y Perú, entre otros; las críticas a la OMC por favorecer el libre comercio; y la apuesta por la relocalización de la producción de las empresas estadounidenses hacia EE.UU. Sin embargo, hasta el momento, no se ha verificado esta tendencia.

El “América First”, que prometía generar empleo e impulsar la industria nacional, volver al “made in América” vs. el “made in China”, ha mostrado escasos resultados. No parece haberse conseguido un aumento en la competitividad de las industrias locales, pues la mayoría está atada a una cadena de producción invariablemente internacional. A esto se suma la disminución de las ganancias en las industrias manufactureras de EE.UU., como la de producción de alimentos, bebidas y tabaco, las productoras de petróleo, carbón, químicos y otros productos durables que se fabrican en territorio estadounidense. En un análisis reciente se menciona que esa caída de las ganancias podría explicar la política proteccionista al interior y la política de libre mercado al exterior.

Sin embargo, esta merma no se observa en todos los sectores. El complejo industrial-militar (una de las principales fuentes de empleo en EE.UU.) sigue gozando de buena salud: la venta de armas de EE. UU. al mundo se incrementó en 2017 (en continuidad con la tendencia con los gobiernos de Obama y de acuerdo a lo prometido por Trump). El último ejercicio fiscal (octubre 2016-septiembre 2017) cerró con la venta de poco más de 41.930 millones de dólares, un incremento del 24% con respecto al mismo periodo anterior.

Los departamentos de Defensa, Estado y Comercio plantean diferentes propuestas para mejorar y acelerar el proceso de ventas a otras naciones y, también, estimular el incremento de empleos en el sector. Según datos recientes, EE. UU. realiza el 57.9% de las transacciones mundiales de armamentos, y con América Latina las ventas rebasaron los 343 millones de dólares en 2016, destacando las compras de México (100.899 millones), Colombia (75.990 millones), Brasil (59.310 millones) y Chile (48.798).

A su vez, las políticas proteccionistas están generando una mayor expansión de las empresas EE. UU. al exterior, expansión que, tal como vienen operando desde hace décadas -si bien por un lado implica aumento de inversiones y puestos de trabajo- también es portadora de una serie de “condicionamientos” a las economías (sobre todo las periféricas), asociados a exenciones impositivas, fuerza de trabajo barata y condiciones laborales “flexibles”, etc. -cabe recordar que en esta tónica van las reformas laborales y previsionales de los gobiernos de derecha en Argentina y Brasil, por ejemplo-.Los factores por los cuales las políticas proteccionistas podrían generar mayor inversión de las empresas estadounidenses en el exterior son: ( el encarecimiento de los costos de producción derivado del incremento de aranceles para insumos de uso difundido, como acero y aluminio;  la repatriación de capitales puede inducir a una apreciación del dólar que también atente contra la competitividad local y las políticas anti-inmigratorias pueden atentar contra el “reclutamiento de cerebros” que realizan las empresas estadounidenses en todo el globo para desarrollar las tareas de innovación en su país.

Las guerras, la droga, el hambre, en el Siglo XXI
Otros efectos como las drogas son parte de la acción de EEUU, el principal consumidor de estupefacientes del planeta, la inmoralidad de los gobiernos de Colombia, han creado el mayor imperio de la droga, controlado por presidentes corruptos, el mismo presidente Duque, es parte de la familia de los carteles de la Droga.  Siendo Uribe señalado de participar habitualmente en el diseño y ejecución de matanzas perpetradas por los paramilitares colombianos, como el caso de la Matanza de El Aro cometida en 1997.
En esa, según relata el periódico de Miami, El Nuevo Herald en informo, que el mismísimo Álvaro Uribe, planeo la matanza con los dirigentes de las Autodefensa Unidas de Colombia y posteriormente acudió personalmente a felicitar a los paramilitares que “brillantemente” habían asesinado, con motosierras, al menos a 15 campesinos indefensos, matanza por la que la Corte Interamericana de Derechos Humanos condenó a Colombia.

Ahora en la actualidad del gobierno de Duque en Colombia, se mantienen la variables del terrorismo en Colombia, la muerte de luchadores sociales, el desplazamiento de los campesinos, los asesinatos de ex Farc son parte de las políticas de Uribe, como los ataques a Venezuela y los intentos de atentados al presidente Nicolas Maduro, los vínculos  del terrorista Guaidó con los rastrojos, quedo al descubierto en corredores para las fechorías, del terrorismo impulsado por Trump, para intentar controlar el petróleo, el oro, el Coltán, la imposibilidad de derrotar al gobierno venezolano, ha creado una histeria del psicótico Donald Trump, no solo en Venezuela sino con Cuba, en su resistencia de mas de 50 años, esta es la realidad de las guerras imperialistas contra los pueblos del mundo.

(*) Periodista, politólogo y analista internacional
diegojolivera@gmail.com

domingo, 19 de mayo de 2019

Venezuela: Respetuosa respuesta al amigo Ismael Zuaznábar



Por Tony López R:
Por considerar de interés los comentarios del amigo Ismael Zuaznabar, y no reducirlo a una respuesta de carácter personal, más aún cuando mi estimado Ismael, socializó sus críticos comentarios, que me parecieron excelentes, pero como con algunos no coincido y son de interés para lo opinión publica y para el conocimiento de nuestros lectores, estime pertinente escribir este artículo.

Respondo con gran respeto y les daré respuesta párrafo por párrafo, subrayo en rojo tus comentarios y los míos en negrita.  Con algunos coincido, hay otros que no, o al menos yo veo esquinas que tal vez tu no vez o tal vez sea yo el que no las vea, pero es la manera de ayudarnos y unirnos en la defensa de nuestros pueblos y más aún cuando están amenazados por el imperio, como es el caso de Venezuela, Cuba y Nicaragua. Y en esa posición sé que estarás de acuerdo conmigo y de eso estoy seguro.


Usted pidió opinión y muy respetuosamente le doy las mías donde en rojo les pongo mis diferencias con su enfoque de esta situación donde no se muestra que un país que llegó a recibir hasta más de 100 mil millones de dólares de ingreso petrolero si hubiera sido medianamente bien administrado no estaría en esta crisis endógena sobre todo y aumentada desde las acciones estadounidenses que la empeoran, pero no determinaron nunca su génesis.

Hoy la lucha sobre el tema Venezuela, hay que verlo en lo endógeno, pero la prioridad es lo que está sucediendo en lo exógeno y no es un slogan lo de todas las opciones están sobre la mesa, es una irrespetuosa soberbia e imperial amenaza, que está muy claramente definida de lo que tienen decidido:  Una intervención militar en Venezuela.  Lo que le falta es el quien, el cómo y el cuándo, es en esa dirección, donde están trabajando. Salvo que la repulsa regional de nuestros pueblos y la firmeza y unidad de los venezolanos la impidan como hasta ahora.

Lo bien administrado o no, no determinaron nunca su Genesis, la determinación de su Genesis fue la decisión del presidente Hugo Chávez, al declarar el carácter revolucionario, socialista y bolivariano de su gobierno y de allí la decisión del imperio de combatirlo. Y no viene solo de la actual administración. Bush y Obama hicieron todo lo posible por derrocar a Chávez y a Maduro, pero fracasaron, la última acción de Obama, fue declarar a Venezuela como una amenaza a la Seguridad de los Estados Unidos.

El apetito imperial de aplicar la Doctrina Monroe, lo dijo claramente el presidente Donald Trump, reiterado por el Secretario de Estado Mike Pompeo y Jhon Bolton, de que el actual gobierno en la Casa Blanca se propone aplicar la Doctrina de “América para los americanos” y de eliminar los gobiernos socialistas de Venezuela, Cuba y Nicaragua. Por tanto, no paso por alto que haya existido malos o erróneos manejos administrativos, financieros, burocratismo y corrupción, pero no es la Genesis del problema, puede y es parte del problema, pero no lo estratégico. También es un elemento que compete al pueblo venezolano y a su gobierno enfrentarlo y buscar la mejor solución para beneficio de todos sus ciudadanos. Me ciño más en lo exógeno, que si nos compete a todos los que no aceptamos políticas imperiales.

Puede existir lo que apuntas en lo endógeno, pero será, que ese pueblo no reconozca el trabajo de las Misiones como por ejemplo  Barrio Adentro, Robinson, entre otras muchas y que se obvie que Venezuela es libre de analfabetos, que Venezuela ha elevado el sistema de salud y atención a su población, como no tiene ninguno de los países de América Latina, especialmente los que se han declarado enemigos del chavismo como Colombia, Argentina, Perú, Brasil, Chile, Panamá y que hablar de Honduras y Guatemala. Cual de esos gobiernos ha entregado 2 millones 200 mil viviendas totalmente amuebladas a sus pueblos y siguen trabajando en esas misiones de carácter social. Esos beneficios deben ser reconocidos o es que ya los tienen asumidos y no cuentan. Que hizo COPEI Y AD en los últimos 50 años de gobiernos, es público y repudiado el robo que hicieron en esos gobiernos, se robaron hasta los clavos.

Dices que en el orden administrativo o en la gestión gubernamental existen errores y algunos graves, lo ha expresado Maduro públicamente, pero lo importante es que está situación endógena como tu bien dices, la vienen combatiendo desde el 2013 y en los momentos actuales, la autocrítica, el análisis de los errores y la rectificación de ellos está en debate. Esos problemas no se resuelven de un día para otro, o crees que en la Cuarta República no había burocratismo. De corrupción y robo ni que hablar de los gobiernos adecos y copeyanos.

Que hay burocratismo, corrupción, problemas administrativos, lo han dicho los actuales líderes y dirigentes chavistas. También algunos importantes corruptos y traidores han desertados como la ex-Fiscal, que es un ejemplo de esa corrupción, por eso hoy conspira y es apoyada por Estados Unidos. O los exgenerales que participaron en el Golpe del 2002 y los actuales dos generales que traicionaron, él último quien estuvo vinculado al derrotado Golpe de Estado del pasado 30 de abril.

La crisis venezolana actual, no es de lo años de Maduro como Presidente, es una crisis, que viene desde la época de Chávez, ARTIFICIAL para provocar el derrocamiento de la Revolución, y con toda intención de robarse la riqueza del pueblo-nación venezolana, crisis creada por Estados Unidos, y por considerar que un sistema socialista como el declarado por Chávez, representaría un mal ejemplo para el resto de los pueblos y países de la región. La decisión de enfrentar al Socialismo del Siglo XXI, la había tomado el gobierno de George W Bush.

Esto no lo digo yo, lo han dichos altísimos mandos militares estadounidenses, entre ellos y desde el año 2015 se viene hablando de “la operación libertad Venezuela”. En efecto, el general John Kelly ex jefe del Comando Sur de EEUU lo expuso ante el Comité Senatorial del Congreso norteamericano,  luego su sucesor el almirante Kurt W Tidd,   quien en enero del 2016 asumió el mando de Comando Sur y tenía la misión de poner en práctica el llamado Plan Maestro o la Operación Libertad.

El 15 de febrero del  2017 el Almirante Kurt W Tipp ante la Comisión de Defensa y Seguridad del Congreso de los Estado Unidos expuso las ideas del Plan Maestro o de la Operación Libertad  y dijo:   “apelar a aliados domésticos como a otras personas insertadas en el escenario nacional con el objetivo de generar protestas, disturbios e inseguridad, pillaje, saqueos, robos, asaltos y secuestros de buques y de otros medios de transportes, con la intención de desabastecer el país, a través de todas las fronteras y otras posibles maneras, poniendo en peligro la seguridad nacional de sus vecinos, fortalecer las sanciones finacieras y económicas y comerciales e impedir que el gobierno venezolano tenga acceso al dinero que tienen depositados en bancos norteamericanos y extranjeros".

Añadió “Panamá, Colombia, Brasil, Guyana son puntos claves de la operación militar, con el apoyo de Argentina y de «otros amigos», bajo control del Pentágono. Ya tienen preparadas desde las bases que ocuparán, los países de apoyo directo (fronterizos) hasta hospitales y centros de acopio de víveres para sus soldados”

Cuando la periodista argentina Stella Caloni denunció el Plan, señalaba que el  Almirante Tipp menciona que se tambalea la “dictadura venezolana chavista como resultado de sus problemas internos” y  “Asumió que este escenario fue creado por ellos mismos. En este caso justifican sus acciones afirmando que el gobierno venezolano acudirá a nuevas medidas «populistas» para conservar el poder”.

Todo lo arriba expresado por el Almirante Tipp, se ha venido cumpliendo milimétricamente desde el 2014, con el apoyo interno de Leopoldo López, Henrique Capriles, María Corina Machado, Julio Borges, Ramos Alud, entre otros, todos vinculado a hechos terroristas, sabotajes y campañas psicológicas, con el respaldo de los medios de prensa y comunicación y redes sociales venezolanas opositores a la Revolución Bolivariana.

O sea, no han sido los problemas endógenos del gobierno chavista, ya sea en la época del presidente Chávez, también de Nicolás Maduro, los graves problemas presentados han sido ARTIFICIALMENTE creados, organizado y dirigido desde el Comando Sur de los Estados Unidos, con el irrestricto apoyo de la oposición de extrema derecha venezolana.

Este Plan sigue vigente, hoy con más fuerzas por el gobierno de Trump, a la hora de escribir esta nota el Almirante Craig Faller, jefe del Comando Sur de Estados Unidos, manifestó recientemente que “está dispuesto a asistir en materia militar al diputado Juan Guaidó para lograr el derrocamiento del presidente Nicolás Maduro y de la Revolución Bolivariana”.

Hoy 13 de mayo, se conoció la noticia en el programa Dossier que el Almirante Craig, se encuentra en Honduras, y se ha reunido con el presidente hondureño Orlando Hernández para convocar a una reunión, con el fin de desarrollar ejercicios navales y militares en la zona del caribe a donde estarían llegando mil efectivos militares israelitas. También hubo una reunión del canciller colombiano Holmes Trujillo con el presidente hondureño, cuya agenda era el tema Venezuela, y a su vez se dio a conocer que el jefe del Comando Sur se apresta a viajar en esta semana a Bogotá, a fin de coordinar acciones contra la nación andina.

Por otra parte, hay que decir, que Venezuela fue y es un Estado solidario y no solo con los países del Caribe, a estos países caribeños les ha venido subvencionando mediante préstamos pagaderos a muchos años, el abastecimiento de petróleo y sus derivados.  Petrocaribe ha sido una fórmula de integración solidaria y bolivariana hacia esos países, incluyendo a Cuba, Nicaragua y Honduras, este último país hasta el golpe de Estado militar de junio del 2009 recibió el apoyo venezolano, los militares gorilas hondureños lo cortaron.

Muchas operaciones secretas se han realizado primero contra el Gobierno de Hugo Chávez y ahora contra Maduro, el Golpe de Estado de abril del 2002, fue uno de ellos y la Revolución Bolivariana y Chávez fueron benévolos y dejaron libres a los traidores y vende patrias, que se diluyeron en la Plaza Altamira.  Son los mismos que hoy lideran las conspiraciones, apoyados no solo por Estados Unidos, también por Colombia, me refiero al gobierno de Álvaro Uribe Vélez, hoy continuado con Iván Duque y en los gobiernos de Pastrana y Juan Manuel Santos y este último, quien dentro del plan de intervención gringo solicitó ingresar en la OTAN, una manera de tratar de salvar lo nacional y así formar parte de una fuerza internacional.

Como la autorización del presidente Uribe de establecer siete o más bases militares del ejército de los Estados Unidos en territorio colombiano, bajo el pretexto de combatir el narcotráfico, una fórmula para esconder sus reales propósitos intervencionistas en la región, la demostración de que todo era un engaño quedó en evidencia con el fuerte regaño del presidente Trump al presidente Duque, porque los cultivos de coca y amapola han crecido de manera alarmante y de hecho el tráfico de droga.

Todos esos Gobiernos neogranadinos apoyaron a la contrarrevolución y Bogotá es su centro. Fueron los paramilitares y sectores de las Fuerzas Militares colombianas los que respaldaron las acciones del 2002, pero luego fueron los narcos paramilitares con el apoyo gubernamental bogotano los que organizaron y entrenaron a las bandas paramilitares de venezolanos opositores en Táchira, Zulia y el Estado de Miranda, que organizaron y dirigieron las guarimbas del 2014 y 2017.  Muchas de esas acciones fueron denunciadas por el senador Gustavo Petro cuando cumplía su mandato en el Congreso.

Los jefes del narco paramilitarismo, como Salvatore Mancuso, Jorge 40, Don Berna, Carlos Castaño, entre otros, fueron los que proporcionaron fuerzas y medios para crear severos problemas de orden público y de sabotajes a la economía venezolana, desde el 2002 hasta el 2008, todo eso con el visto bueno del gobierno uribista y detrás de ellos las propias agencias estadounidenses.
No hay que olvidar que 120 paramilitares colombianos fueron detenidos en Caracas cuando se disponían a atacar el Palacio de Miraflores, presos y confesos y eso no puede negarlo nadie.   Por gestiones del presidente Uribe y las bondades de Chávez y del sistema judicial venezolano, fueron liberados todo bajo el principio de evitar confrontación con el gobierno de Colombia. 

Con toda esta información, estimo que la situación actual de Venezuela, no fue creada por la mala administración del ejecutivo venezolano, lo que no exime que responsabilidades ha tenido, pero queda demostrado que los grandes problemas que han afrontado y afrontan   fue creado por las acciones de Estados Unidos y sus aliados opositores venezolanos, a los que se han unido el Grupo de Lima por presiones y en algunos casos chantajes de la Casa Blanca.  Con lo ya explicado, respondo a su vez el siguiente señalamiento: peor evaluación no existe de esta crisis con mayor componente endógeno que exógeno y busque datos del dinero manejado y el que se han robado en estos años que sin complicidad gubernamental es imposible de hacer y si quiere le envió los datos. 

Información y datos claro que me los puedes enviar, es más me resultaría muy importante recibirlos, pues lo esencial es buscar y tener la certeza de la verdad, siempre con el criterio de ser absolutamente constructivo y sin hacerle el juego al imperialismo.

El siguiente señalamiento, está relacionado con la unidad y con el concepto pueblo y me dices: pero el pueblo, este pueblo si se consideran los alrededores de 30 millones de habitantes está más dividido que unido y partido en muchos pedazos y esta unidad es muy cubana y errónea.
Yo no sería tan categórico, señalar que el pueblo venezolano está más dividido que unido, quizás pudieras tener razón, la unidad es muy difícil de medir y por tanto de apreciar, hay muchas formas de insatisfacciones y no todos tienen que ser por estar en contra del sistema político imperante en Venezuela. Que hay diferencias y divisiones, sí pueden existir, pero como mejor se puede medir, es cuando tomas los resultados de todas las elecciones que se han desarrollado en Venezuela, y de unos 20 eventos electorales el chavismo ha perdido solamente dos. O sea que 18 de ellas los ciudadanos se han unido en torno al sistema de gobierno que impera.

O sea, votar para que los gobernantes chavistas sigan en el poder, es un elemento que te demuestra que hay unidad. Y eso es incontrovertible, pero la oposición apela a denunciar fraude sin prueba alguna. Pero cuando ellos (la oposición) ganaron la Asamblea Nacional y el referendo sobre la enmienda constitucional, no dijeron que hubo fraude, o acaso solo hay fraude cuando gana el chavismo, ese cuento hay que echárselo a otro.

No creo que los venezolanos asuman la unidad de ellos como la cubana.  Error, no creo que mi artículo este dando el concepto de unidad como la cubana y si fuera así sería un error de mi parte, estoy partiendo de la unidad de los venezolanos como lo explicado en los dos párrafos anteriores.
Por otra parte, no te olvides de las diferencias entre el proceso revolucionario cubano y el venezolano.

En Cuba se derrotó al ejército que apoyaba a una sangrienta dictadura y a una burguesía criminalmente explotadora y al triunfo del 1 de enero ellos huyeron a Estados Unidos, pensando que los americanos derrocarían al gobierno revolucionario de Fidel, y hace 60 años esperan por los gringos. 

En Venezuela fue el ejército bolivariano el que hizo la revolución y produjo cambios estructurales, pero no tan radicales como los de Cuba, ningún proceso revolucionario es igual a otro y cada uno tiene su impronta. La burguesía venezolana no huyó, se quedó y existe convivencia con un sistema de economía mixta de propiedad privada sobre los medios de producción industrial, agropecuario, comercio, bancario, la economía estatal es más débil, el Estado vivía y vive de la renta petrolera. No previeron desarrollar la agro-industrialización del país, vivían de las importaciones gringas y colombianas, con este último país, las exportaciones llegaron alcanzar en la primera parte de la década del 2000, cerca de 6,000 mil millones hasta que Uribe arruinó ese comercio, increíblemente en detrimento del empresariado colombiano.

El llamado a la unidad siempre hay hacerlo porque, sé que hay, como bien dices,  problemas de unidad, pero cuando los clavos hierven, entonces apreciamos que hay unidad, y lo expresan y repito eligiendo a los chavistas para que sigan el rumbo de la revolución. Se expresa muy claramente en el nivel de unidad que existe en las Fuerzas Militares venezolanas, te darás cuenta que UNIDAD hay. Si tomas en cuenta la actuación del sistema Judicial, también hay UNIDAD. O sea, poderes reales y defensores a ultranza de la Constitución Bolivariana allí se expresa la UNIDAD, que como bien sabes la oposición la ha violado y viola constantemente.

Que hay diferencias, que hay insatisfacciones, malestar en la población, claro que las hay, en todas las sociedades, incluida la cubana, ese es un fenómeno natural y en sus distintas manifestaciones, en lo político, social, económico cultural y más ese pueblo que recibe diariamente una andanada de mentiras y manipulaciones de los medios hegemónicos venezolanos contrarios al chavismo. Bastante unidos están, dentro de la diversidad y ojalá que todo siga en esa dirección pues la UNIDAD es lo que hace fuerte a los pueblos.

Pero mientras más acciones realice la contrarrevolución, como la de quemar a seres humanos vivos como han hecho en Venezuela, mientras más amenace Estados Unidos a Venezuela, más repudio tendrá y más odio engendraran. El tablero está claro, el gobierno bolivariano ha llamado al diálogo y la oposición no ha querido dialogar. ¿Por qué? porque tú sabes que en cualquier terreno van a perder y que la opción es la de una intervención militar donde también serán derrotados.

Pero Estados Unidos no podrá mantener está política de  apoyo a Guaidó, cuyos fracaso y ridículas posiciones, han ido al caño de aguas negras, porque la oposición en Venezuela ha perdido total prestigio con este último intento de Golpe de Estado, hasta los Adeco se han quemado y no les quedará otra salida que sentarse en la mesa a dialogar y todo indica que el propio presidente Donald Trump ha despertado del sueño y se da cuenta que sus asesores los Pompeo, Bolton, Pence y  Rubio, lo han embarcado en una política errada, que lejos de beneficiarlo para las próximas elecciones lo pueden enlodar.

 Y aquí aprovecho para responderte otra de tus interrogantes.
No es hoy Estados Unidos el poder hegemónico en nuestro planeta, el multilateralismo se está imponiendo (equivocada concepción de la globalización).

No, creo que el error no es mío, pues me refiero al   multilateralismo que hoy enfrenta Estados Unidos y tratan en vano de imponer una posición unilateral, esto no debe confundirse con la globalización, ese es otro fenómeno complejo y peligroso, pero que no tiene que ver con lo que llamo la atención. Estados Unidos no es ya el dueño del mundo, aunque se esté comportando como tal, no olvidar que Trump tuvo que hablar con Putin sobre el tema de Venezuela y el mandatario ruso le respondió que no será permitido por Rusia una acción de fuerza, tampoco China y la Unión Europea, aunque esta última reconoce a Guaidó, pero hay fisuras en la Unión Europea, sobre ese reconocimiento.

Tampoco hay consenso en el Grupo de Lima sobre el uso de la fuerza y algo se cocina en este Grupo, cuando está pidiendo el apoyo de Rusia y Cuba para que sirvan de intermediario o facilitadores con el gobierno de Venezuela, ese llamado es significativo y evidencia que hay un giro político que no se puede pasar por alto, pues ese Grupo y su mentor Luis Almagro, jamás pediría tal cosa, si no fuera orientado por Estados Unidos. Obviamente, que no es, precisamente para que estos dos aliados de Venezuela, les apoyen a una aventura militar, sino para buscar el dialogo.

Tomar en cuenta que las Naciones Unidas acaba de realizar un evento, convocado por la presidenta de la Asamblea General de la ONU, María Fernanda Espinoza, haciendo un llamado a fortalecer el multilateralismo entre los Estados. La globalización y la aldea global es otro fenómeno que surge luego de la caída del muro de Berlín y que obviamente en la medida que el mundo se va desarrollando, la ciencia, la técnica, las finanzas, lo social y cultural, se va haciendo mucho más global y es allí el peligro para los países menos desarrollados.

Para un ataque militar y una invasión de Estado Unidos a Venezuela tiene y debe estar respaldado por un acuerdo multilateral y el Consejo de Seguridad de la ONU, por eso, tanto Estados Unidos, como sus dos principales aliados, Colombia y Brasil, están apostando a provocar una pueblada o dividir a las Fuerzas Militares bolivariana y es allí donde han encontrado el valladar inexpugnable que le impide materializar esa aventura.

No han podido desconocer lo que significa Rusia y China, como firmes aliados de Venezuela.  Tampoco han tomado en cuenta que esa Revolución surgió del seno de las Fuerzas Militares venezolanas y  están fracasando en cada intentona golpista, lo cual no quiere decir que no haya uno que otro oficial traidor, traidores puede haber, pero no pueblos, como un día, dijo Fidel y el Comandante en Jefe y ministro de Defensa le respondió claro y fuerte al Jefe del Comando Sur, “los que vestimos de verde olivo venimos y representamos al pueblo, defendemos nuestra Constitución, la democracia y la soberanía de nuestra Patria”.

Con los grandes fracasos del auto proclamado y la oposición interna, es muy difícil que puedan lograr éxitos en sus planes. De todos modos, el asedio seguirá pues lo que busca Estados Unidos es robarse toda la riqueza minero-energética de Venezuela.

Sobre la pregunta de porque no apresar a Juan Guaidó, me parece inteligente no hacerlo, pues Guaidó se ha ido desprestigiando y apagando, el último llamado que hizo a sus seguidores la asistencia fue exigua, no hay que apurarse, para no convertirlo en victima y alentar a los sedientos de sangre y den la justificación para cualquier acción violenta y provoquen lo que no han logrado en todos estos años. Él tendrá que responder ante la justicia, en el momento precisó.

Los otros han huido como ratas y se han escondido o metidos en embajadas al amparo de los fueros diplomático, que Estados Unidos no respeta, como lo que sucede hoy con la embajada de Venezuela en Washington, para desprestigio de la política exterior estadounidense, que se comporta como una nación, no del tercer mundo para no ofender a tantos países dignos que lo integran, sino del bajo mundo mafioso. Violando y pisoteando los Acuerdos de Viena y la Carta de la ONU. El gobierno de Estados Unidos está sentando un precedente que se le puede virar en contra, como le está ocurriendo en Irak, que han tenido que salir en estampida, incluso de su propia embajada en Bagdad.

jorgarcia726@gmail.com

sábado, 23 de marzo de 2019

La violencia nuestra de cada día



Por Juan Pablo Cárdenas S.:
Es muy explicable el impacto mundial causado por el ataque perpetrado por dos jóvenes brasileños al establecimiento educacional de donde habían egresado, en una masacre que provocó la muerte de unos diez estudiantes y maestros. Un horror que suele ser frecuente en los Estados Unidos, pero no tanto en América Latina donde los grados de violencia son también muy altos e insensatos.

Las pavorosas imágenes transmitidas por nuestros canales de televisión y por internet han llevado a algunos comunicadores a sostener que, en relación a otros, Chile escapa o apenas roza la lacra de la violencia criminal. Sin duda una pretensión similar a aquella falsa creencia de que tampoco en nuestro país existen los índices de corrupción que afectan a otros países, pretensión que en poco tiempo se ha desmoronado con los severos y reiterados ilícitos cometidos por la clase política y empresarial, además de los fraudes y desfalcos millonarios de Carabineros y cada una de las ramas de la Fuerzas Armadas.


Sin duda, todavía salvamos de acciones tan espeluznantes como la ocurrida recién en Sao Paulo, pero en ningún caso podríamos negarnos a que el fenómeno de la violencia ya está entronizado en nuestra sociedad, en sucesos registrados cotidianamente por nuestra prensa y muy especialmente la Televisión. Por sobre lo que sucede en la política, la economía, la cultura o el mismo deporte, son los portonazos, los asaltos callejeros, los femicidios y tantos otros delitos los que más destacan los principales titulares de nuestros medios de comunicación. Al mismo tiempo que los sondeos de opinión pública constatan la creciente preocupación de los chilenos respecto de su seguridad, tanto que ya se ha consolidado en un lucrativo negocio la venta de todo tipo de servicios para registrar e identificar las acciones delincuenciales en los barrios, calles y viviendas de todo el país.

Es curioso, pero ya no existe asalto o despropósito criminal que no sea registrado por las cámaras instaladas por doquier a lo largo y ancho del país y cuyas imágenes, por supuesto, sirven de valioso material periodístico para los noticiarios de TV, así como para alimentar el morbo de los cibernautas. Ninguna estadística nos señala, sin embargo, que estas medidas y recursos, como los propios drones de la policía y las municipalidades, nos estén previniendo realmente de tales delitos. Por el contrario, todo indica que un porcentaje muy alto de la población ya ni siquiera denuncia muchos de estos atentados, en la desconfianza que ha crecido respecto de la probidad y eficiencia de las policías, jueces y fiscales.

Al mismo tiempo que se agota la capacidad de las cárceles para encerrar a tantos infractores, son ahora los gendarmes de nuestros numerosos penales los que se quejan de ser acusados por su presunta complicidad con los internos dispuestos para su vigilancia y cuidado. Porque también los opinólogos, que tanto abundan en nuestros medios, han descubierto que es rentable al raiting especular con la idea de que existe en la administración de justicia una puerta giratoria para que los delincuentes entren a las cárceles, pero vuelvan prontamente a las calles prácticamente impunes.

Si la delincuencia no siquiera creciendo y alarmando cada vez más a los chilenos, el Gobierno no estaría impulsando una ley para que las policías puedan hacer “controles de identidad” a partir de los 14 años de edad, iniciativa de la cual Piñera dice contar con un masivo apoyo ciudadano, aunque su propuesta está recibiendo el repudio de las organizaciones de Derechos Humanos y de protección a la niñez.

Se sabe que la violencia que asola a tantos países es directamente proporcional a sus índices de pobreza, pero sobre todo de desigualdad entre sus habitantes. Además de comprobarse que no basta con otorgar más recursos a las policías o hacer cada vez más sofisticado los sistemas de vigilancia callejera para purgar este mal, cuyas alarmas y “botones de pánico” ahora están en cada vehículo, cuanto, en barrios y casas, además de bancos, estadios y toda suerte de recintos públicos y privados.
En el caso chileno, los gobernantes y parlamentarios son muy diligentes en aprobar leyes y normas para hacer frente a la violencia, otorgándole mayores fueros a las policías para enfrentar el descontento social.  De forma que otra vez un carro lanza aguas ha provocado lesiones graves a una estudiante de la Universidad Católica de Valparaíso que desfilaba como los centenares de miles de mujeres en su Día Internacional. Pero lo que no existe son medidas y correctivos para redistribuir el ingreso, elevar el salario mínimo y las posibilidades de empleo, aumentar el monto de las pensiones, hacerles frente a las especulaciones de las farmacias y laboratorios, entre tantas otras lacras que alimentan la decepción y estimulan la violencia. Así como tampoco se encara eficientemente el creciente tráfico y consumo de drogas que condena a una enorme cantidad de menores a abandonar sus estudios y desahuciar una vida digna. Todo esto porque, por mucho tiempo también se creía que el narcotráfico era un tema ajeno y que Chile era a lo sumo un pasadizo de la droga, pero sin que ésta llegara a ser consumida por nuestra población.

Esta pretensión de sentirnos superior a nuestros países vecinos, o creernos “un país mediterráneo, pero en un mal barrio” (como llegó a escribirse) nos ha conducido a enfrentarnos tardíamente a los problemas más acuciantes de nuestra población. Haciendo gala de una arrogancia que se expresa en darle la espalda al continente y renunciar, por ejemplo, a la posibilidad de enfrentar más coordinadamente con nuestros vecinos problemas que nos son comunes y traspasan nuestras demarcaciones geográficas.

Renuentes a aceptar, en realidad, que hay naciones de nuestra región en verdadera posibilidad de hacerse más soberanos, ricos y promisorios en relación a un país prácticamente mono productor y cuyas reservas naturales están hipotecadas al extranjero, bajo la férula estricta del colonialismo. Con un sistema institucional vergonzoso, además, si se considera que es hereditario de la constitución pinochetista de 1980. Por lo cual mantenemos un severo pendiente democrático, si se considera la pobrísima participación ciudadana, la consiguiente falta de legitimidad de las autoridades, el descalabro general de los partidos políticos y la ausencia de organizaciones sociales.

Añadiendo a lo anterior, el déficit de ser uno de los pocos países de América Latina que todavía no reconoce su plurinacionalidad y mantiene una larga guerra racista y de ocupación en territorio mapuche. Un conflicto que suma cada día más víctimas y luctuosos episodios. Sin descartar ahora el riesgo de que todo remonte y alimente la posibilidad de otro quiebre institucional, una confrontación como la encarnizada Revolución de 1891, o nos condene a hechos de violencia tan inauditos como el bombardeo a La Moneda en 1973 y el homicidio de los dos últimos presidentes constitucionales. Episodios que hablan, más bien, de que siempre en nuestra historia hemos estado a la cabeza de los países más violentos de la Región, donde los atropellos a la paz social son nuestro pan de cada día.
Aunque, de momento, escapemos de aquellos hechos terroristas de nuestro pasado no tan remoto, por lo demás. Probablemente porque siempre han sido instigados y ejecutados por la ultraderecha, muchos de cuyos activistas hoy son los que nos gobiernan y siguen al abrigo del poder.

juanpablo.cardenas.s@gmail.com

miércoles, 27 de febrero de 2019

La violencia, el terrorismo y los narcos cultivos en Colombia


Por Diego Olivera Evia:
Trump hacen la vista gorda a la droga Colombia en EEUU

En este nuevo artículo nos pareció importante señalar, que Colombia y el Grupo de Lima, utilizaran las fronteras con Venezuela, para crear una farsa sobre una ayuda humanitaria, para ingresar producto enviados por EEUU, en mal estado y varias personas han muerto, pero lo más peligroso es los falsos positivos, sobre hechos de violencia en las fronteras, por los grupos guarimberos venezolanos, en la quema de camiones en los puentes, entre Colombia y Venezuela, como una farsa musical con cantantes por gringos, para intentar una agresión con la anuencia del narco Duque y sus familia, como los inmorales presidentes de Chile Piñera y el fascista presidente Marito de Paraguay y los funcionarios de EEUU y la amenazas de una intervención armada.


En ese sentido el farsante Juan Guaidó, que ha llegado a manifestar en Colombia, que las muertes de venezolanos son parte de una guerra civil necesaria, pero el fracaso de la pantomima en la frontera del lao colombiano, y los ataques de los grupos violentos, pagados por funcionarios de Colombia y el mismo intento de esta farsa, llevo a la ruptura de relaciones por parte del gobierno de Venezuela.
En respuesta a la bravuconada y la violencia creada por Colombia y EEUU, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ofreció una entrevista con la cadena estadounidense ABC News en la que se refirió al presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Juan Guaidó, y al apoyo que le da Estados Unidos a Guaidó, quien se proclamó presidente interino de Venezuela el 23 de enero. “Él tendrá que enfrentar a la justicia”, dijo Maduro sobre el regreso a Venezuela Guaidó, que desde el pasado 22 de febrero se encuentra en territorio colombiano. “Él no puede ir y venir y la justicia le tenía prohibido dejar el país. Yo respeto las leyes”.

La violencia, el terrorismo y los narcos cultivos en Colombia
Según la Defensoría del Pueblo de Colombia, entre el 1 de enero de 2016 y el 30 de junio de 2018, fueron asesinados 311 líderes sociales. La violencia contra defensores de derechos humanos se recrudeció después de la firma de los acuerdos de paz.

La creciente ola de homicidios de líderes y defensores de derechos humanos en las regiones que más se vieron afectadas por el conflicto armado sigue preocupando. Después de la firma del acuerdo de paz, los sectores sociales han luchado por reestablecer el tejido social en sus territorios, por reclamar sus tierras y devolver el progreso que la guerra les negó por más de 50 años.

Estos hechos de violencia se presentan en los lugares más azotados por el narcotráfico, donde hacen presencia bandas criminales y otros actores ilegales, que impiden el desarrollo del posconflicto. Lo paradójico es que, aunque en el país se han reducido los homicidios, día a día se conocen nuevos casos de colombianos asesinados que ejercían un liderazgo importante en su comunidad.
Las víctimas más recientes fueron Margarita Estupiñán, asesinada en Tumaco, municipio del departamento de Nariño, que tiene uno de los mayores índices de violencia del país; Ana María Cortés, Gerente de la Campaña de Gustavo Petro en Cáceres (Antioquia); Felicinda Santamaría, en Quibdó (Chocó), y Luis Barrios Machado, en Palmar de Varela (Atlántico).

Hay desacuerdos en las cifras de líderes asesinados
No existe un consenso por parte de las autoridades y organizaciones sobre el número de personas muertas a la fecha, lo que hace difícil establecer y verificar cada uno de los casos. Según el informe presentando el pasado mayo por La Cumbre Agraria, Campesina, Étnica y popular, La Marcha Patriótica e Indepaz, 123 líderes y defensores de DDHH han sido asesinados durante el 2018.
Sin embargo, la cuenta que lleva el Ministerio del Interior es menos robusta, ya que a hoy ha verificado la muerte de tan solo 33 líderes sociales. Por su parte, la Defensoría del Pueblo habla de 311 dirigentes muertos. La entidad señaló que Cauca es el departamento que más reporta defensores asesinados, con 78. Le sigue Antioquia con 43, Norte de Santander con 21, Nariño con 18, Valle del Cauca con 16, Chocó con 16, Risaralda con 14 y Arauca con 13.

La Organización de Naciones Unidas, no solo señaló que con "el recrudecimiento de la violencia" en estos departamentos se hace imposible construir una “paz estable y duradera” sino que instó al gobierno a “reforzar las medidas de prevención, protección e investigación para garantizar el derecho a la vida de los colombianos.

Desde hace ocho años y hasta la fecha, 4.770 menores dejaron sus vidas en hospitales y rancherías, convirtiéndose en escalofriantes cifras que no han sensibilizado a gobernantes y entidades involucradas en este flagelo. Al dar a conocer esta triste realidad, el magistrado de la Corte Constitucional Alberto Rojas Ríos afirmó que “esto es una barbarie”.

Lo hizo en la audiencia pública en la que el alto tribunal, junto a la Procuraduría General de la Nación, abordó en Riohacha las “problemáticas estructurales” que se describen en la sentencia T302, a través de la cual se declaró el estado de cosas inconstitucional en el departamento de La Guajira, donde este año han muerto 39 niños por desnutrición o causas asociadas a esta.

Trump hacen la vista gorda a la droga Colombia en EEUU
Colombia sigue siendo el principal productor de cocaína del mundo al registrar aumentos históricos de las plantaciones de coca y de su capacidad para producir esa droga en 2017, según informó ayer miércoles la ONU. Los cultivos de hoja de coca crecieron 17% hasta 171.000 hectáreas, mientras que el potencial de producción de cocaína subió 31% respecto de 2016 a 1.379 toneladas, un récord desde que comenzaron estas mediciones en 2001, dijo la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Onudc).

"Quiero expresar mi profunda preocupación por la cantidad de dinero que mueven las drogas ilícitas", dijo el representante en Colombia de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Onudc), Bo Mathiasen, en la presentación del informe anual. En 2016 los sembradíos ilícitos de coca, cuya hoja es insumo básico para la cocaína, se situaban en 146.000 hectáreas y la capacidad de producción de la droga era de 1.053 toneladas métricas. Mathiasen dijo que no solo hay más plantaciones, sino que estas producen un 33% más de hojas que en 2012 por la variedad de las plantas y su menor afectación de plagas. "Una de las razones para el incremento es la percepción de menor riesgo frente a la actividad ilegal. Ante esta baja percepción en el riesgo, aumentó el área sembrada", afirmó.

La ONU alertó que las fronteras con Venezuela y Ecuador son las más impactadas por los narcos cultivos, actividad a la que están vinculados 119.500 hogares colombianos. El departamento más afectado sigue siendo Nariño, limítrofe con Ecuador, que tiene un área sembrada mayor a la de Perú, segundo país con más cultivos ilícitos con 43.900 hectáreas. Por ser un punto estratégico de salida de droga a Estados Unidos, esa zona es disputada por los rebeldes del ELN, narcotraficantes y disidencias de las FARC, la otrora guerrilla que el año pasado se desarmó y transformó en partido político.

El 64% de los aumentos de los sembradíos se presentó en los departamentos de Antioquia, Cauca, Putumayo y Norte de Santander, en los límites con Venezuela. Pero el 80% de las plantaciones sigue encontrándose en los mismos sitios que en la última década. "La economía ilegal en estos municipios supera ampliamente la economía legal", afirmó Mathiasen.

En este sentido, la ONU declaró que tiene "una profunda preocupación por el capital derivado de la economía de las drogas", que afecta los esfuerzos para superar medio siglo de conflicto armado y la estabilidad del Estado.

El presidente estadounidense, Donald Trump, ha criticado el aumento de los narcos cultivos, que su gobierno sitúa en 209.000 hectáreas (diez veces el departamento de Montevideo), aunque ha ratificado la ayuda que le otorga a Colombia hace décadas. Duque aseguró que en las próximas semanas su gobierno, que asumió el 7 de agosto, presentará una "política integral" contra el narcotráfico. Las medidas incluyen desarticular redes de suministro, prevención de la drogadicción y erradicación forzosa.

La meta del gobierno es acabar con por lo menos 140.000 hectáreas en cuatro años. "La decisión aquí es frontal contra ese delito", aseveró Duque. El mandatario ha cuestionado la estrategia antidrogas de su antecesor Juan Manuel Santos, que combinaba la eliminación de plantaciones con acuerdos de sustitución voluntaria con los campesinos cocaleros consagrados en el acuerdo de paz con las FARC. En el pacto, apoyado por Estados Unidos, los excombatientes se comprometieron a ayudar a combatir el narcotráfico, cuyos recursos financiaron su levantamiento armado.

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