Por Rodolfo Cortés Calderón:
Pareciera que el digno y valiente pueblo chileno y los demás
países de Latinoamérica están destinados a vivir la desgracia permanente de la
bota militar asesina y usurpadora. Además de Chile, lo vemos en Bolivia,
Ecuador, Honduras, Haití, Brasil, Colombia, Guatemala, El Salvador y otros
países donde se ven estos nubarrones auspiciados por el militarista y
guerrerista Donald Trump, emperador del Imperio.
La enseña “POR LA RAZÓN O LA FUERZA” forma parte del escudo
y la bandera de Chile y, ayer, en un discurso difundido por la televisión
internacional lo repitió con énfasis el sanguinario Sebastián Piñera que ya
lleva en sus espaldas según RT 23 asesinados, más de 2200 heridos, entre ellos
casi 300 afectados en los ojos, más de 6300 detenidos y un estimado de 4,500
millones de dólares en daños como una señal de que este energúmeno neoliberal
no tiene el menor concepto de lo que es LA RAZÓN ya que sólo ha aplicado LA
FUERZA.
Da la impresión que en nuestras sociedades latinoamericanas
se está reviviendo el satánico Plan Cóndor que desde mediados del siglo XX y
hasta casi los albores del siglo XXI dejó una secuela de millones de personas
entre asesinados, desaparecidos, desterrados, encarcelados y donde sobresalía
de parte de los psicópatas y esquizofrénicos militares la tortura, violaciones
a mujeres y hombres, secuestros de niños y niñas, robo y saqueo de fortunas,
etc.
Hubo un caso muy patético en Chile, entre centenares, de una
mujer luchadora magisterial MARTA LIDIA UGARTE ROMÁN (1934-1976) que después de
ser detenida, desaparecida y torturada fue tirada desde un helicóptero militar
en las playas chilenas y, en Honduras, hay algunas versiones de que el padre
GUADALUPE (JAMES) CARNEY (jesuita) y otros miembros de un grupo guerrillero
sufrieron la misma pena en las selvas de Olancho en 1983. Atrocidades hasta lo
inimaginable.
EL ASESINO PLAN CÓNDOR DEL SIGLO XX
El Plan Cóndor es una de las páginas más oscuras y dolorosas
de la realidad latinoamericana del siglo pasado. Es una realidad que más se
ensañó y se visualizó en América del Sur, los países de Mesoamérica lo vivieron
con igual o peor dolor, sin ser visibilizados. En el Sur, ya se ha hecho algo
de justicia, en Centroamérica está en ciernes.
Este Plan surgió en los tiempos del mal llamado presidente
demócrata John F. Kennedy que gobernó Estados Unidos desde 1961 hasta 1964, año
en que fue asesinado por el mismo Imperio.
El principal objetivo de este Plan u Operación Cóndor era
contener y destruir los movimientos insurgentes que motivados por la exitosa
revolución cubana de 1959 se daban en el continente.
De ahí surgieron dictadores militares golpistas de la talla
de Augusto Pinochet Ugarte en Chile;
Humberto Castelo Branco, Emilio Garrastazu Medici, Ernesto Geisel, Artur
da Costa y Joao Figuereido de 1964 a 1985 en Brasil; Jorge Rafael Videla,
Roberto Viola, Leopoldo Galtieri y Reynaldo Bignone desde 1976 hasta 1985 en
Argentina; dictadura cívico-militar de 1973-1985 en Uruguay; Anastasio Somoza
Debayle en Nicaragua; Alfredo Stroessner en Paraguay; Hugo Banzer Suárez en
Bolivia; Oswaldo López Arellano en Honduras; Juan Velasco Alvarado en Perú;
Julio Adalberto Rivera y Fidel Sánchez Hernández en El Salvador; José María
Pinilla Fábrega en Panamá; Fernando Romeo Lucas García, Kjell Eugenio Laugerud
García y Efraín Ríos Montt, en Guatemala y Henri Namphi y Prósper Avril en
Haití, todos estos dictadores tuvieron como su centro de “formación” la tétrica
Escuela de las Américas.
LA SUBLEVACIÓN CHILENA
Octubre de 2019 será un mes y año mal recordado siempre por
los Chicago Boys, padres del abortado Modelo Neoliberal. Esta semana los
insurgentes chilenos llegaron a su primer mes de lucha, sin flaquear un solo
día.
Y no es para menos, 46 años de oprobiosa dictadura de
Augusto Pinochet,16 años y, 30 años de sus monigotes “demócratas” politiqueros
liberales, socialistas y neoliberales. Ellos son los únicos responsables de
toda esta crisis y de los asesinados, detenidos y heridos.
El enfoque primario de los insurgentes está en la
destitución de Piñera y la convocatoria a una asamblea nacional constituyente,
sin dilaciones.
LA CÓMPLICE OPOSICIÓN DE CHILE
Queriéndole dar “miel con el dedo” a los sensatos y
conscientes resistentes chilenos el poder neoliberal piñerista presentó, desde
el Legislativo a la sociedad chilena un adefesio de propuesta--elaborada por el
poder neoliberal sin tomar en cuenta a la ciudadanía—que propone un plebiscito
para abril 2020 donde los chilenos escogerían entre dos opciones, las dos
surgidas del poder político neoliberal y quizá a finales del mismo año elegir a
los “constituyentes”.
Sin la menor duda los movimientos populares resistentes y
algunos sectores políticos que no se unieron al gobierno, entre ellos los
partidos comunista y humanista, rechazaron la propuesta.
El lunes recién pasado la resistencia chilena convocó a un
paro general que fue todo un éxito.
¿ESTAMOS A LAS PUERTAS DE UN PLAN CÓNDOR II?
Aunque no lo deseamos, todo parece apuntar a que las
sociedades latinoamericanas estamos a las puertas de un Plan Cóndor No. II. Si
observamos con detenimiento los presupuestos nacionales de la mayoría de los
ministerios de Defensa y las Fuerzas Armadas de estos países, estos
presupuestos se han incrementado escandalosamente en detrimento de los
presupuestos sociales.
Sólo en Honduras, nuestro pequeño país, el dictador de turno
Juan Orlando Hernández, JOH, incrementó hace unos pocos días a las Fuerzas
Armadas más de 150 millones de dólares, para un oculto proyecto productivo,
mientras la pobreza alcanza el 63% y de estos el 38% vive en indigencia (INE
2017). A esto se suma que desde el golpe de Estado de 2009 los únicos
presupuestos que se incrementaron fueron los de Defensa y Seguridad.
Pero ésta no es sólo la realidad de Honduras, vea lo que
sucede en Colombia, Brasil, Chile, Ecuador, Guatemala, El Salvador, Paraguay,
Haití, etc. y ahora en Bolivia con un pueblo en contra del golpe de Estado,
reprimidos por el ejército.
CONCLUSIONES:
Parece que estamos ya en el velorio y entierro del modelo
neoliberal que tarde o temprano llegará a todos los países de la órbita
imperial capitalista.
Uno de los claros propósitos de los movimientos populares
resistentes de Latinoamérica debe ser la eliminación de las onerosas y
represoras fuerzas armadas nacionales que son la punta de lanza del
imperialismo contra todo proyecto ciudadano.
Los partidos políticos, sin excepción, incluyendo los
autollamados de izquierda, en todos estos países están en decadencia y desacreditados
por el descarado y prostituido amorío con el neoliberalismo.
rcortescal@yahoo.es
0 comentarios:
Publicar un comentario