jueves, 22 de febrero de 2018

El neoliberalismo y las multinacionales destruyen el planeta

Por Diego Olivera Evia:
La sociedad  en una crisis de valores y una guerra imperial

La realidad de un modelo capitalista de carácter neoliberal, ha sembrado una crisis endémica en la sociedad moderna del Siglo XXI, el desarrollo de la trasnacional Monsanto han creado, una crisis en la agricultura y afectado a la ganadería y los ríos, arroyos y hasta los principales afluentes de América Latina, como el Paraná, el rio Uruguay, el Rio de la Plata, entre otros, sufren las consecuencias de los productos químicos, como el Glifosato que además de envenenar la tierra, ha generado enfermedades y deformaciones en seres humanos, siendo los niños los más afectados.



Esta empresas amplían sus ganancias en destruir la naturaleza, como son la plantación de  los arboles transgénicos para abastecer a las papeleras, han creado una devastación y generar realidades desérticas en el Cono Sur Latinoamericano, la misma empresa Monsanto en su alianza con la Bayer, que hoy fabrican medicinas con peligrosos efectos en los seres humanos, creando esterilización, como nuevas enfermedades, recordar sus vínculos con el SIDA, experimentado en África con miles de seres humanos,  y además el largo historial de Monsanto en la creación de químicos, como el  agente naranja, que fue utilizado en Viet Nam, con altos costos de  millones de vidas, como miles de malformaciones, que se siguen generando por los mismos genes.

El capitalismo no repara en los efectos secundarios, para el desarrollo de las trasnacionales, destruye el ecosistema, creando los efectos invernaderos, los conocidos fenómenos naturales como la Niña y el Niño, que de manera manipulada, crea sequias y grandes ciclones, huracanes, que han desbastado naciones, como le paso a Puerto Rico, que luego de una destrucción total, nos ha sido apoyado por EEUU, quien se niega a dar recursos, como la actitud del presidente de la supremacía blanca, llega a esta isla y le tira papel sanitario, esta es la verdadera cara del neoliberalismo, la muerte y la guerra son efectos colaterales, de la muerte por encargo de EEUU y la OTAN.

Esta realidad ha llevado al planta a peligrosos efectos alimentarios, la Organización de Naciones Unidas (ONU), ha sido avasallada por EEUU, en su indiferencia a la situación climática, el mismo Estados Unidos se ha negado a colaborar económicamente con el tema del recalentamiento y la ruptura de la capa de ozono, con peligros para la raza humana, para los especialistas de la ONU y de varias ONG, no hay una actitud de humanismo en la relaciones a nivel global, solo si impone el poder del más fuerte, una sociedad regida multimillonarios, que manejan las grandes trasnacionales, apoyando a los países desarrollados.

La sociedad  en una crisis de valores y una guerra imperial
La sociedad y los pueblos son devastados por guerras imperiales, en nombre de una hipócrita y falsa democracia, sustentada en EEUU y la Unión Europea (UE), son parte de la gran mentira de los sueños de los inmigrantes en Estados Unidos, las consecuencias de la nueva política de Trump, sustentada en una sociedad clasista donde los blancos son privilegiados, creando una verdadera discriminación  con los afro americanos y el desprecio a los latinos, ahora esta guerra fascista se amplía a los pueblos musulmanes, pero sin embargo el Departamento de Estado, apoya a unos falsos musulmanes, que no profesan el Corán, y que decapitan a los cristianos, a los sunitas, a los sirios, en nombre de una falsa apología, el Estado Islámico o Dahes  son creados por los Clinton, y ahora apoyados por el magnate Trump, con su ejército de 30 mil mercenarios, que nos musulmanes, son la cabeza de una nueva guerra imperialista.

Aún recordamos la foto del Ben Laden, con las autoridades de EEUU en su cruzada contra los soviéticos, en Afganistán, pero a la vez apoyaba a los talibanes un grupo de fanáticos  islámicos, que aplican una variedad del Corán, con una visión milenaria y sin la escuela de Mahoma. Pero todos estos movimientos terroristas, son parte de la estrategia de EEUU, para controlar el petróleo del Medio Orienta, tratando de balcanizar a Siria, para apoderarse del petróleo, de la misma manera el opio de los afganos son parte de los negocios, con las drogas, de México y Colombia, una realidad de un mundo sórdido, para una sociedad enferma con es la gringa, donde mueren cientos de estudiantes por jóvenes enfermos, con armas compradas en armerías sin ninguna obstrucción, son una sociedad enferma-

Ahora esta realidad de violencia en el mundos, son parte de la campaña de la Industria Militar de EEUU, que ahora en mano de Trump, se han vuelto vendedores de armas, como proveedores a países como Israel, Arabia Saudita, a la vez armar a los terroristas en el mundo y amenazar a todas la naciones del planeta, obligándolos a cumplir sus amenazas, o recibirán sanciones como a Venezuela, Rusia, China, entre otros, y darle el beneplácito a los gobiernos que se arrastran ante el poder imperial, para conseguir dádivas y cubrir a corruptos al costo, de aplicar las políticas del FMI y el Banco Mundial (BM).

Esta es la realidad de una sociedad humana, que vive en la miseria, que son explotados y que no pueden lograr una sociedad de iguales, ahora en Libia se venden a los libios como esclavos, se muere en el mediterráneo niños, mujeres, producto de las mafias de traficantes, ni la ONU puede detener estas barbaries y sin embargo disfrutan EEUU y la UE de la muertes y las guerras de exterminio, solo con el objetivo de amasar fortunas y engordar las fortunas, al menor costo que son la vidas humanas.

diegojolivera@gmail.com

1 comentario:

  1. Buen e interesante articulo, de Diego como siempre, "me quito el sombrero ", Gracias Diego, gracias Barómetro, Abrazo y saludo.
    carmen Sánchez Hernández,

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