Por Jesús Sotillo Bolívar::
- Ya el mundo ni las personas decentes se calan la conducta difamadora y perversa del gobierno de los Estados Unidos, que pretende demonizar países con el tema de las Drogas para justificar su intervención.
- Estados Unidos no solamente fomenta el terrorismo y adiestra a reconocidos terroristas internacionales, sino que es gran productor de drogas de todo tipo y el mayor consumidor de drogas en el mundo, porque su sociedad es adicta.
- Estados Unidos no solamente es productor de Drogas, es el mayor consumidor del mundo y actualmente su sistema financiero recibe más del 70% del dinero sucio de los Carteles de Drogas de Colombia y México.
Valga la
expresión para calificar de alguna manera la conducta del gobierno de los
Estados Unidos y su actual presidente, quien informa y así lo reseñan los
medios internacionales su propósito de acusar ante la Jurisdicción interna de
su nación, tal como lo hicieron a la sazón con el presidente Noriega de Panamá,
al Presidente Constitucional de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás
Maduro como narcoterrorista.
Parece que
no le quedaba otra opción al Presidente Trump, de escandalizar a la opinión
pública internacional, para desviar la atención sobre un suceso que
aparentemente iba a pasar desapercibido, pero que oportunamente el Presidente
Nicolás Maduro, lo denunció públicamente, la detención en Colombia de una
camioneta con un lote de armas, que se utilizaría para atentados terroristas en
Venezuela, según lo confesó públicamente, el hasta ahora hombre de fiar de los
Estados Unidos y de la oposición apátrida venezolana, liderada por Juan Guaidó,
el ex militar, auto exiliado Cliver Alcalá Ordóñez.
Cordónez,
viéndose rechazado como un preservativo usado, conducta típica de los
norteamericanos después que han exprimido a sus confidentes y ya no les sirven
para nada, destapó la hoya y en
entrevista realizada para una emisora radial de Colombia, donde reside con la
anuencia del Presidente Duque, destacó que el se responsabilizaba por las
armas, que eran para ser utilizadas en actos terroristas contra las Autoridades
legítimas de Venezuela y que las mismas se habían comprado mediante un contrato
firmado por Juan Guaidó, sus asesores norteamericanos y con la anuencia de
los gobiernos de ambos países (Es decir
una conspiración Colombo-norteamericana contra un país democrático: Venezuela).
Una prueba
más, si es que todavía existían dudas, de que la Oligarquía Colombiana, hace el
trabajo sucio de Estados Unidos en nuestra región, prestándose no solamente
para que se intervenga su Soberanía con la permanencia de siete bases militares
en su territorio, sino, sirviendo de punta de lanza para agredir e intervenir
contra la soberanía e integridad territorial de sus países vecinos.
Pero lo más
descarado de la acusación Trumpiana, es el argumento utilizado: Acusar al
gobierno de Venezuela, de Narco Terrorismo,
un país donde su territorio y eso lo saben todos los investigadores en
materia de drogas y organismos especializados en la materia, es agredido
permanentemente por las bandas y capos de la Droga colombiana, que con la
complicidad de sus gobernantes y la oligarquía que representan, han convertido
a Colombia, reconocido hasta por los propios Estados Unidos, como el Campeón
Mundial en la producción de Cocaína y
otras drogas.
Recientemente,
la prensa norteamericana en grandes titulares a reconoció que la producción de
drogas (Cocaína), más reciente, habían batido el record de producción en
Colombia y nunca el Presidente Trump, utilizó el prefijo Narco para calificar a
su Presidente Duque, por supuesto, son socios en el negocio y Colombia le
aporta la droga a la Sociedad Adicta norteamericana, en eso hay intereses
mutuos.
De allí que
la acusación de Narco y de Terroristas, a las Autoridades Constitucionales de
Venezuela, le queda muy grande al señor Trump. Pues si de algo ha sido acusado
Estados Unidos y eso está documentado y no es secreto para nadie, es un país
que, fomentado, formando terroristas en varios países para utilizarlos en sus
intervenciones. De la droga ni se diga, Estados Unidos no solamente en productor
de drogas sintéticas, actualmente uno de los mayores productores de Marihuana,
que han legalizado, con la argucia de su uso “medicinal”, sino que, además, es
la mayor lavadora mundial de Dinero Sucio proveniente del negocio ilícito de
las drogas.
Según los
expertos y estas cifran también son manejadas por los organismos
internacionales, el sistema financiero de los Estados Unidos, recibe más del
70%, óiganse bien más del 70 % del dinero que reciben los Carteles Colombianos
y Mexicanos que se dedican a este negocio ilícito. Está documentado también y
es un hecho público y notorio que Estados Unidos es el mayor proveedor de armas
para estos carteles que tiñen de sangre nuestra región. Es tan escandaloso
hecho que la señora Hilary Clinton en su visita a México, y eso fue reseñado
por la prensa internacional.
Pidió
disculpas al pueblo mexicano, al reconocer que los carteles asesinos de la
droga que enlutan a la sociedad mexicana y mantienen casi secuestrados a sus
gobiernos con la ola de la violencia desenfrenada, se nutren de armamentos
sofisticados de la industria norteamericana, con anuencia de sus gobernantes. Y
eso suceden igualmente con los carteles colombianos.
Pero la
ridiculez del presidente Trump, es mayor y más descarada, porque cree que el
mundo es ingenuo o pendejo como se dice en Venezuela. Es que acaso millones de
personas no han visto las series documentadas de la Cadena Televisiva Netflix,
donde se ha puesto en evidencia la complicidad de los gobiernos de Estados
Unidos con los gobiernos corruptos de la región y carteles de la droga para el negocio
del tráfico de Drogas, donde no se escapa sus policías supuestamente
especializadas en la lucha contra las drogas (DEA). ¿Es que acaso el presidente
Trump va a continuar echándole al mundo el cuentico de vaqueros estilo, John
Wayne?
Profesor de la UCV
jesussotillo45@gmail.com
0 comentarios:
Publicar un comentario