Por William Castillo Pérez (el indio):
Los países del mundo no requieren gerentes o administradores
para que les dirijan. Como lo preconiza el neoliberalismo. Los países,
requieren Padres y Madres que les protejan, les cuiden les orienten, les
instruyan en lo necesario para emprender la actividad que justifique su
existencia en un planeta que es su hábitat y su más seguro y esplendido
proveedor.
Nunca, un dicho popular ha sido más acertado, que aquel que
dice, que "el venezolano nace con la arepa bajo el brazo. “Pero
verdaderamente, todos los pueblos del planeta, están enfrascados, por inducción
e interés de los hegemónicos, en un accionar, que definitivamente y a todas
luces los muestra y los convierte en una cosa.
Está comprobado, que el planeta está diseñado para propiciar
la existencia de manera eficiente de todas las especies y entidades que en él
viven. De ello se infiere, que la inequidad con la cual se distribuyen los
haberes que nos ofrece la Pachamama, y la competencia estresante a la cual se
somete al pueblo es innecesaria.
Aun cuando los hegemónicos se empeñan en justificar esa
competencia, con argumentos ridículos para motivar una supuesta superación
personal.
Es definitivamente humillante el aprovechamiento de la
pobreza de otros, para lucir y exaltar la bondad de grupos privilegiados, que
se exhiben cómo dueños del poder y las bendiciones divinas, cuando
"generosamente" le dan empleo, o realizan jornadas humanitarias para
hacer caridad a los pobres. Actos que necesitan, para acopiar a su cuenta de
"buenas acciones", para seguir mostrando ante la providencia, que se
justifica haberles privilegiado con tantas bendiciones. Dicho con más claridad:
Todo rico necesita su legion de pobres, para asegurar su entrada al cielo.
Pero cuando en el oscuro ambiente de oprobio, aparece la luz
de la revolución y las clases desposeídas comienzan a disfrutar de sus haberes
otrora confiscados. El secular depredador arremete contra el pueblo, para
hacerle entender que es la revolución quien le escamotea la mayor suma de
felicidad, gran deseo para su pueblo del Padre Libertador. Desgraciadamente
ésta matriz de opinión, ha permeado la mente de muchos ciudadanos, quienes,
víctima de una gran confusión, culpan al Gobierno revolucionario de los daños
ocasionados por la agresión contra el pueblo.
Pero ¿Por qué culpar solo al Gobierno revolucionario? El
pueblo debe hacerse respetar. ¿Hasta cuándo seguir cualquier matriz de opinión
contraria a la verdad de nuestra patria, nuestra historia, nuestro gentilicio,
nuestra posición preponderante en el planeta? Hechos bien comprobados así lo
demuestran. Precisamente la revolución bolivariana es un ejemplo civilista a
nivel mundial.
En nuestra patria se llevó a cabo recientemente un evento
político internacional, con la asistencia de 200 delegados de los 5
Continentes.
Para dar apoyo a Venezuela ante la agresión de la derecha
fascista internacional, y condenar las sanciones decretadas contra nuestra
patria por el Gobierno imperial de Donald Trump, todas estas sanciones
dirigidas a bloquearnos comercial y financieramente. Además de agregar la
amenaza de una invasión militar contra nuestra patria. Esa intención de
matarnos de hambre, tiene como fin apoderarse de nuestra gran reserva petrolera
y las importantes reservas de minerales estratégicos como el oro, el coltan, el
torio etc.
Mientras los comentarios de algunos ciudadanos, sólo se
refieren a la mala imagen que la oposición y lacayos del imperio quieren dar de
nuestra patria y nuestro pueblo, ante unos países que en el pasado siempre han
recibido respeto, solidaridad y ayuda generosa del Estado y el pueblo
venezolano. Pero que hoy, a causa de la mala imagen que exhiben migrantes
venezolanos quienes se han dado a la tarea de denigrar de nuestro gentilicio en
esos países, ahora somos vistos como seres indeseables, cuando ciertamente,
somos un ejemplo de libertad, democracia y justicia social en todo el planeta.
Ya basta de doblar las rodillas ante enemigos que solo son
motivados por infames intensiones de un imperio, que solo quiere destruir la
revolución bolivariana, el más importante bastión de defensa de la Patria de
Bolívar.
Tengamos más decoro y respeto por nosotros mismos.
La Patria se defiende, no se degrada. Vamos a darle un
"parao" a esa actitud sumisa auto destructivo que exhiben algunos
insensatos.
¡Independencia y Patria socialista y soberana!
¡Chávez vive!
¡La Patria sigue!
¡Viviremos y venceremos!
wiliancastillop@gmail.com
0 comentarios:
Publicar un comentario