Por Teófilo Santaella:
A Venezuela la quieren ahogar desde que Donald Trump asumió
el poder como presidente de los Estados Unidos. Aunque, debemos decirlo, los
ataques se iniciaron durante el período de Obama, quien firmó un decreto
declarando a Venezuela un peligro para la seguridad de su país. Sin embargo, ha
sido en el mandato de Trump donde se han intensificado los ataques.
En efecto, La Casa Blanca se ha convertido en un bunker que
sirve de guarida a la pandilla que lidera Trump. Desde ese lugar, en
contubernio con algunos mandatarios de la región, y, en especial, con el visto
bueno de la derecha radical que encabeza Juan Guaidó, desde que este gris
personaje asumió la presidencia de la Asamblea Nacional.
Jamás en la vida republicana de Venezuela, un presidente ha
recibido tanto ataque, desde dentro como de fuera de nuestras fronteras. La
agresión incluye un atentado con drones durante un desfile militar en Los
Próceres en conmemoración de los 81 de la creación de la Guardia Nacional
Bolivariana, y donde se produjeron dos explosiones. Casi todos los complotados
fueron detenidos.
En el mes de mayo de 2020 se produjo, en las costas
guaireñas, otro intento de tomar preso al presidente Maduro y llevarlo a
Estados Unidos. Pero fracasaron y los mercenarios, incluyendo a dos estadounidenses,
fueron detenidos. Algunos de ellos han sido sentenciados a 20 y 24 años de
prisión. A estos hechos se agrega un centenar de actos violentos contra el
gobierno de Maduro, los que han producido grandes pérdidas de bienes
materiales, unido a perdidas de vida de gente inocente.
Pero no han podido con la Venezuela, heroica, patria del
Libertador Simón Bolívar, quien luchó sin descanso hasta echar al último
español de la geografía de cinco naciones. Y no han podido ni podrán porque hay
un pueblo consustanciado con el legado que dejó Chávez. Alrededor de Maduro
existe un partido aguerrido como el PSUV, y una Fuerza Armada Bolivariana unida
y cohesiona, como un solo hombre, junto a su Comandante en Jefe, que no es otro
que el presidente Nicolás Maduro Moros. Pero, lo más importante es el pueblo
con que cuenta el presidente. Un pueblo aguerrido y resteado con los ideales de
Chávez, bajo el lema archiconocido: “Pruebo Unido, jamás será vencido”
Querétaro, Agosto de 2020.
(Periodista)
teofilo_santaella@yahoo.com
Tienes razón cuando dices, que nunca había sido atacada por un gobierno extranjero. Pero por otra parte, cabe destacare, desde la época precolombina, Venezuela no había tenido un gobierno tan nefasto ya tan corrupto, como el mal llamado supuesto "legado de Chávez", como ingenuamente pretendes hacer ver. Ubícate.
ResponderEliminarAquí la defensa es la Patria Soberana , no la de los actores políticos que ejercen el poder publico. Prestarse a justificar los medios para derrocar a un gobierno con todos los errores que pueda tener, es un error garrafal.
EliminarEs falta de dignidad abrirle la puerta al enemigo, cuando caen las bombas nadie tiene patente de corso. OK