sábado, 19 de enero de 2019

El bombardeo económico subida de precios es más fuerte que la banda de Lima


Por Juan Martorano:
En mi observación activa y monitoreo de las variables políticas, económicas y sociales, me topé con un tuit del compatriota Roberto Malaver del 12 de enero del presente año, y por el aserto y acierto de esa afirmación, es que decidí tomarlo para titular las líneas que a continuación procedo a escribir.
Dicho sea de paso, que para el momento en que las mismas sean publicadas, el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro estará en la presentación de su Mensaje a la Nación, a la vez del Plan de la Patria 2019-2025.

Confieso que siendo analista y realizando una evaluación analítica en profundidad, me confíe y subestimé a Juan Guaidó, pensando que no daría “pelea”, pero con la operación de “falsa bandera” que montó el día de ayer, más la activación de las “células durmientes” del paramilitarismo con lo realizado en los galpones del IVSS en Guarenas- Guatire, el Hospital Clínico Universitario y en Maracaibo, deben mantenernos con los ojos bien abiertos.

Pero, como lo señaló algún autor en alguna plataforma tecnológica, red social digital (Si me llega su nombre, no tendré problema en darle sus créditos de manera pública) la CIA y el Departamento de Estado de EEUU. En coordinación con Fedecámaras y el fascismo de extrema derecha que hace vida en ese sector opositor al gobierno de Nicolás Maduro, ordenaron “disparar” la cotización del dólar sin ninguna explicación que los mismos analistas económicos de la oposición no tienen argumentos ni respuestas.

Las consecuencias de ello, es que el salario mínimo, hasta el momento de redacción de estas líneas, se encuentra ubicado en 4.500 bolívares soberanos. No obstante, estos son los precios (hasta ahora) en los que se encuentran los productos que se detallan a acontinuaciòn, son los siguientes:
1 kg de carne de res 5.000 Bs Soberanos
1 kg de sal 1.500 Bs Soberanos
1 kg de arroz 2.000 Bs Soberanos
1 kg de azúcar. 3.000 Bs Soberanos
1 kg de plátanos. 1.500 Bs Soberanos1 kg de spaghetti. 3.500 Bs Soberanos
1             kg de harina de trigo. 3.000 Bs Soberanos
1 mantequilla. 3.000 Bs Soberanos
1 mayonesa. 4.000 Bs Soberanos
1. Cartón de huevos. 5.000 Bs Soberanos.
Evidentemente, que estos precios se duplican y triplican como lo señala este autor (o autora) en varios estados de la geografía nacional.
Lamentablemente los “precios acordados” por el Gobierno Bolivariano no se cumplen, y mucho menos funcionan para beneficio del pueblo.
Efectivos de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana y de cuerpos de seguridad se hacen de la vista gorda, pues en realidad sus altos directivos están detrás de este “Golpe Continuado” donde muchos de sus miembros hacen vida en las mafias de las redes de distribución de alimentos, bienes y servicios para el pueblo.

Son parte de las mafias de contrabando de extracción de alimentos y combustibles, lamentablemente.
Nuestros cuerpos de seguridad e inteligencia están infiltrados, sino recordemos el intento de asalto a la caravana presidencial, el “falso positivo” de Guaidó y las acciones terroristas del ex CICPC Oscar Pérez. Y cuidado si no persiste dentro de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana un sector reaccionario que desee complotarse en un “zarpazo”.
Estructuras políticas del Estado- Nación venezolano como gobernaciones, alcaldías, Concejos Municipales igualmente se hacen de la vista gorda ante este estado de cosas y ante la ocurrencia de hechos criminales contra todo un pueblo.

Las consecuencias de esto son extremadamente graves, pues debido a esta manipulación incontrolada del tipo de cambio, y debido a los altos precios, la población en general se está viendo imposibilitada de adquirir bienes, acceder a servicios, alimentos y medicamentos. Generando todo el caldo de cultivo para un estallido social, que cada vez se observa más cercano.

Muy probablemente el Ejecutivo Nacional anuncie un nuevo incremento de salario, pero las mafias tienen infiltrado al alto gobierno, por lo que ya manejan esta información y desde ya adelantan todas sus acciones a fin de continuar confiscando el poder adquisitivo de la familia venezolana.
Se estima que dicho incremento pueda ubicarse entre los 15 mil y 19 mil bolívares soberanos, pero este monto ya ha sido robado por las grandes mafias que controlan el 80% de alimentos, bienes y servicios.

Asimismo, el Estado ha perdido el control de distribución a través de los CLAP. Ya que esta distribución ha mermado considerablemente y son pocos los estados los que lo reciben.
Una de las conclusiones que podemos señalar, es que las medidas coercitivas unilaterales ilegales, el bloqueo económico y financiero están haciendo su trabajo, y de acuerdo a lo señalado por voceros de la administración Trump, el cerco contra Venezuela será cada vez más feroz, buscando escalar en las condiciones para la materialización del estallido social que necesitan los factores de poder de la corporatocracia mundial para legitimar la intervención militar de tipo “humanitaria” sobre Venezuela.
Por ello, pienso que la oposición hará todo lo que le corresponda para desviar la atención sobre el verdadero problema que afecta a la clase trabajadora y a la familia en Venezuela. La merma de su poder adquisitivo y deterioro de su calidad de vida, producto de la manipulación del tipo de cambio.
El detalle de todo esto no es el diagnóstico de esa información. El propio Karl Marx lo señaló al escribir el Manifiesto del Partido Comunista en 1848: “Los filósofos lo que tratan es de interpretar el mundo y de lo que se trata es de transformarlo”.

En ese sentido, sin negar las complejidades del momento actual, pero el pueblo ya está obstinado de diagnósticos, y quiere es soluciones, y tiene razón, porque para eso somos gobierno y para eso reeligieron a Nicolás Maduro por seis años más.

Ya basta de panfleto y de retórica hueca y vacía en la que algunos de nuestros y nuestras dirigentes han caído desde hace bastante rato, y hagamos mayores esfuerzos por una praxis verdaderamente revolucionaria. La paciencia del pueblo no es infinita, tiene un límite y puede acabarse.
Así que cumplámosle al pueblo antes de que otros le roben la esperanza.

¡Bolívar y Chávez viven, y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen!
¡Hasta la Victoria Siempre!
¡Independencia y Patria Socialista!
¡Viviremos y Venceremos!


1 comentario:

  1. Todos los procesos políticos exigen el seguimiento constante para prevenir y evitar las desviaciones, el oportunismo y, el riesgo del fracaso. La vía es mantener en alto y a salvo la ética pública.

    ResponderEliminar