viernes, 12 de octubre de 2018

Las Plataformas y sus nexos con el neofascismo del sub imperialismo brasilero


Por Rolando Prudencio Briancon:

A estas alturas va quedando más claro lo que ya ha dejado de ser una inocente sospecha, sobre que las corrientes ultraderechistas en América Latina están recuperando terreno; y que sin mencionar a los EE.UU., que en Latinoamérica, sigue teniendo una influencia inapelable dentro las corrientes conservadoras locales, en la lógica de que todo lo que suceda en la Casa Blanca se refleja directamente en su Patio Trasero, por lo que se puede concluir que hay un resurgimiento del neofascismo.

Y es que después de la elección de Trump hace más de tres años atrás,se ha instalado el ultra conservadurismo en la administración del nuevo inquilino de la Casa Blanca, cuyas políticas han mostrado un olímpico desprecio a toda decisión democrática, que a nivel internacional las naciones han asumido como compromisos a cumplir. Por ejemplo: El cumplimento de los compromisos de las Acuerdos Climáticos. Otro caso tan elocuente ha sido  el reconocimiento de Jerusalén como capital de Israel; resolución que ha ido en contra de la ONU que zanjó la disputa hace más de medio siglo atrás. O el  hecho más emblemático de una cobarde actuación, en la que al más puro estilo neo fascista, ha sido la cobarde separación de los padres migrantes de sus hijos que dispuso el gobierno de Trump; sin mencionar la construcción de MURO, que de por sí se convierte en un emblema puro del fascismo.

Este resurgimiento de corrientes neofascistas; ya en Latinoamérica está marcado por las elecciones que han dado el triunfo a: Macri en la Argentina, Duque en Colombia, Piñera en Chile y Jair Bolsonaro; que aunque no ha sido electo aún, la apabullante diferencia que existe entre él y Haddad en primera vuelta, parecen convertirlo  en el nuevo presidente del Brasil.

Bolsonaro debe ser quien mejor encarna la vuelta del neofascismo a Latinoamérica; precisamente por sus retrógradas reivindicaciones y su intolerancia racial hacia la gente de color, como al migrante, quien como  en el caso de Trump, también ha reivindicado el uso de armas para repeler a quienes son una “amenaza”.

Las repercusiones en la política boliviana, sobre una eventual elección de Bolsonaro; al margen de que será una relación complicada entre los gobiernos, pues a decir de Bolsonaro, quien ya se manifestó contrario al gobierno del presidente Morales, manifestando en la forma en la que lo hacen los fascistas señalando: “No queremos que Bolivia se aproxime a Venezuela y mucho menos a Cuba”

Pero no sólo que Bolsonaro verbaliza su ataque al gobierno nacional, sino que ya tiene sus operadores y operadoras  locales dentro el país, como es la activista María Amelin Suárez, portavoz de la plataforma: “Las calles de Bolivia”, quien protagonizó en mayo de éste año un incidente durante la inauguración de los juegos Sudamericanos, tratando de empañar la inauguración del evento.

Pero además si tomamos en cuenta que ha sido Santa Cruz -a por su cercanía geográfica con el Brasil- donde se ha germinado desde la las corrientes conservadoras de los VERDES, las acciones más violentas y agresivas; con los mismos tintes de intolerancia racial contra los “collas”, durante el Golpe Cívico Prefectural de 2008, se va decantando la rearticulación de un neofascismo nativo en el país.

 prudenprusiano@gmail.com

0 comentarios:

Publicar un comentario