Mostrando entradas con la etiqueta Coreano. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Coreano. Mostrar todas las entradas

martes, 17 de octubre de 2017

En política, ni en otras materias se puede jugar con el futuro

Por Omar Villanueva Olmedo:
Atención electores de Chile

Sin duda que los eventos políticos y sociales se prestan para que los votantes hagan conjeturas sobre los futuros. Por ejemplo: ¿Qué caminos seguirá “la independencia de Cataluña? Más inquietante: ¿Qué beneficios y perjuicios tendrá el Brexit para Chile? O, ¿Cuál será la sobrevivencia de los actuales gobiernos argentino, brasileño, boliviano o venezolano  o coreano? ¿Qué pasará con las economías americana, china y otras potencias en plena revolución tecnológica? etc.



Es por eso que ahora nos llama la atención la relación que hay entre: (a) las preferencias de los electores nacionales y (b) las  campañas eleccionarias por la presidencia, porque es notorio que hay una gran inquietud sobre el porcentaje de votación que tendrá cada candidato y si por sus resultados habrá una segunda vuelta.

Los diferentes interesados y no tanto en los temas políticos muchas veces recurren a los resultados que dan encuestas cuyo valor puede estar en aquellas materias que se refieren al pasado o al presente. Y punto. Porque las que se refieren al futuro corren por otros caminos metodológicos.

Como resultados de algunas encuestas se escuchan frases como: “creo que tal candidato será elegido”, o que: “el día 19 de noviembre votaré por fulano porque creo que será elegido(a) presidente”. Estas expresiones están indicando como algo cierto lo que podría ocurrir ese día. Y desde hoy hasta ese día se sucederán muchas realidades que irán en esa dirección, así como, muchas que irán en otras direcciones y sobre las cuales los encuestados no tienen ningún control. Entre hoy y 19/11/17 es posible que: (a) el candidato haya desaparecido, (b) se postergue la elección,  (c) el elector  no se presente a votar, (d) que concurra a una sede que no corresponda y decida volverse a su casa sin votar, (e) otros.
Sólo la elección y el recuento de los votos el 19/11/17 dirá lo que tanto pitonizo quiere anticipar hoy como cierto.

Sin embargo, este proceso de anticipación se presta para comentarios muy sesudo: “hay que ganar en primera vuelta…”, “decidamos ahora sobre la unidad si hay segunda vuelta”, “pasaría a segunda vuelta si es que...” Sin duda que los resultados de la votación dependerá del trabajo que hagan los partidos políticos, los candidatos, los responsables de las campañas, los que no quieren perder sus cargos y los que esperan ser contratados si gana su candidato. También dependerá de muchos otros procesos que se den en el gobierno, en el parlamento, en veredictos o acciones de la justicia, en el clima, en los precios y sus reajustes, en el empleo, en las cuentas de la luz, en los ciudadanos en Chile o el extranjero que decidan votar, y en su salud o previsión y en muchas otras intervenciones intencionadas o fortuitas.

Por lo tanto, como dice el título, con el futuro no se juega, porque cuando un candidato(a) llama a votar de una determinada manera solo está reflejando sus dudas (sus deseos, sus intereses, sus temores, sus ambiciones...) de que ese día ocurra ese evento, pero no dice nada de los muchos otros eventos que  saber que pueden ocurrir, puesto que el evento que menciona es el que quiere que ocurra y con sus dichos pretende influir en otros electores. Pero todo esto, solo muestra que no sabe, ni sabemos lo que va a ocurrir en el futuro.
Pero querido lector lo que más nos llama la atención sobre esta elección presidencial y sus  futuros posibles  es que hasta ahora (1) los candidato(a)s ofrecen que harán más de esto.. o menos de lo otro... con resultados timoratos de bajo vuelo, pero no hay un Programa Integral que anticipe sus propósitos y objetivos a lograr ni los escenarios en los que esos resultados se darían, (2) no hay indicios de que sus presuntos gobiernos estén dirigidos a producir un salto al desarrollo, especialmente cuando sus presuntas  tasas de crecimiento anuales no pasan del 5%, ni cómo se subirán a la “renovación tecnológica” en que ya está en marcha el mundo y (3) por lo tanto, no hay ni siquiera un resumen de los resultados que los ciudadanos  pueden esperar que ocurran en el país hacia  el 10 de Marzo del 2022. Les solicitamos esto hace ya 4 años a los prospecto y responsables de estos asuntos que se prepararan dado que no lo hicieron en ese entonces, pero no se oyó padre ni madre. 4.- Y por último: ¿Cómo harán lo(a)s presidenciables para que seamos un país desarrollado con un ingreso per cápita ad hoc (*) estimado entre 40.000 a 50.000 euros?

Porque, al parecer la historia política y económica del país en las últimas décadas,  y en esta campaña, muestra que los resultados económicos del país al 2022 serán buenos o serán malos según el comportamiento de: (1) el precio del cobre y otras materias primas (2)  la inversión extranjera  (3) el comercio  exterior (4) la demanda interna y (5) de uno que otro elemento sin mayor influencia anticipada (6) el tsunami tecnológico en marcha. Y estos factores están en buena medida fuera del control de las autoridades, sin olvidarse de la corrupción, la criminalidad y el tráfico de estupefacientes y que no contamos con una Estrategia País Consensuada EPC.

CONCLUSIÓN: con la escasa información y poca congruencia que aún se tiene de los programas de los candidato(a)s a la presidencia y de cara a los resultados a obtener a  marzo del 2022 así: ¿No sería lo mismo el candidato que gane?  Sabemos que es posible una mejor respuesta, los chilenos del futuro se la merecen. 

Nota (*) Chile tiene un ipcd (ingreso per cápita de desarrollo) de alrededor de 12,5 mil EUR (euros) anuales. Un país desarrollado debiera tener, actualmente, un ipcd de alrededor de 40-50 mil EUR anuales, monto difícil de alcanzar por Chile en los próximos veinte años. Pasar a tener un ipcd de unos 37.000 EUR, con una tasa de crecimiento pareja de 6% anual, requeriría 21 años, o sea, por allá por el 2038, y suponiendo que las actuales naciones desarrolladas dejaran de crecer en ese período. Fuente: “Pregunta a Presidenciables de Chile” Septiembre 2017
ovillanueva.comunica@gmail.com

viernes, 14 de julio de 2017

EEUU – Pentágono La utilidad de la guerra

Por Néstor García Iturbe

Hace pocos días escribí un artículo relacionado con una empresa que vende generadores eléctricos y que aprovechando la situación que se ha creado sobre Corea del Norte, trataba de infundir terror a la población estadounidense y hablaba de la posibilidad de que el país asiático lanzara una bomba atómica que afectara las principales redes eléctricas de Estados Unidos.



Según los expertos que daban sus criterios, tanto de la CIA como del Pentágono, las redes eléctricas podían considerarse el talón de Aquiles de la sociedad estadounidense, pues al faltar ese tipo de energía el país se paralizaría, no se podría establecer comunicación entre las personas, no habría luz en las casas, los televisores no funcionarían, tampoco las computadoras,  los celulares, ni las bombas que deben llevar el agua a las residencias, no funcionaría el aire acondicionado ni los refrigeradores y así,  un sin número de equipos y servicios, que los estadounidenses no están acostumbrados a que les falte.  SERIA EL CAOS.

Al parecer esta idea de la empresa que trata de vender sus generadores eléctricos, ha sido copiada por otros, inclusive funcionarios del gobierno que están utilizando  “el peligro Coreano” para tratar de resolver presupuestos y compras propias de una situación cercana al estado de guerra.

De acuerdo con los informes emitidos por las fuerza armadas rusas, que nadie duda tienen experiencia en este asunto de los misiles, los militares rusos descartaron que el proyectil que probó Pionyang fuera un misil balístico intercontinental, debido a que estimaron que la altitud de vuelo del Hwasong-14 fue de 535 kilómetros y su distancia alcanzó 510 kilómetros. El Ministerio de Defensa de Rusia argumentó que esos datos de vuelo, corresponden a las características táctico-técnicas de un misil balístico de alcance medio, lo que significa que nunca llegaría a Estados Unidos.

El Mando del Pacífico de EE.UU. también valoró que Corea del Norte lanzó un misil balístico de alcance medio basado en tierra y no un misil intercontinental. Además, las fuentes militares norteamericanas explicaron que el proyectil voló 37 minutos antes de caer en el mar de Japón.
A pesar de toda esta información, donde se descarta que Corea del Norte haya lanzado un misil balístico, quizás porque aún no han llegado a tenerlo, en el Pentágono se hacen planes de pruebas, simulacros y nuevas compras relacionadas con el famoso “escudo antimisil”  que se plantea en estos momentos no está en condiciones  de enfrentar un ataque norcoreano.

La lista de compras que está preparando el Pentágono incluye el mejoramiento de los sensores, radares y misiles interceptores que formando parte del famoso escudo, se encuentran en Alaska y California. Las últimas pruebas realizadas con estos misiles, según la publicación Político, han dado un resultado bastante lejano al 100 por ciento de eficiencia.

El director  del programa de no proliferación del este de Asia, Jeffrey Lewis, planteo que en el nivel operativo y técnico en que se encuentra el escudo en estos momentos, si los coreanos del norte enviaran hacia Estados Unidos todos los misiles que tienen, es posible que pudieran derribarse la mayoría de ellos,” Eso lo determinaría, si tenemos un buen día o un mal día.”

Phil Coyle que trabajó en el Pentágono como Jefe de Pruebas y Análisis de Armamento, planteó que Estados Unidos tenía más eficiencia en destruir   misiles de corto y mediano alcance, que viajan a menos velocidad y en la atmósfera, lo cual es muy distinto cuando el misil viaja a 15,000 millas por hora y por el espacio, especialmente si el enemigo sabe cómo engañarte.

El Pentágono trata de aprovechar la situación, no importa que el peligro este distante, ahora es cuando  nadie se atreverá a  negar o cuestionar los fondos solicitados.


sarahnes@cubarte.cult.cu