Por Jesús A. Rondón:
Era viernes cuando nos despedimos en la oficina, lo hicimos
en medio de un ambiente festivo, que ignoraba las alarmas epidemiológicas que
se encendían en otras latitudes. No regresamos el lunes siguiente y pasaron
meses para que nos viéramos de nuevo. Al encontrarnos no hubo abrazos, por el
contrario, distancias y barreras. Ahora vivimos en cuarentenas intermitentes.
Ya casi cumplimos un año desde ese día, que precedió a la declaración de
emergencia por la pandemia del Covid-19, por parte del gobierno bolivariano, lo
que amerita aportar algunos elementos para un balance necesario en este periodo.
Como es habitual, abordaremos otros temas, entre los cuales se encuentran la
dinámica legislativa, las tensiones alrededor del asunto de los derechos
humanos e informaciones breves.
Un año en la pandemia ¿Ahora qué?
A la fecha el Estado venezolano tiene registro de cerca de
144.000 contagiados (21 casos por cada 100 mil habitantes), de los cuales poco
más de 1.400 han fallecido (133 de fallecidos por millón de habitantes). En
principio, es alentador observar que estos indicadores, no son tan dramáticos
como en otros lares (Brasil encabeza la lista de contagios y Colombia está en
la décima posición global). Mientras que, en el mundo, se superan los 117
millones de contagios diagnosticados para Covid-19 y más de 2,6 millones de
muertes por esta causa. Más allá de las cifras, siempre expuestas a escrutinios
y dudas, es necesario proponer un balance a propósito de este año de vida en
pandemia. Consciente de lo limitado de este espacio, aporto cuatro elementos
claves.
La implementación de las medidas coercitivas unilaterales a
nuestro país, nos ha colocado en situación de bloqueo creciente, que nos ha
exigido como población encontrar formas de resistencia individuales y
colectivas. Esta extraordinaria condición, ha significado una ventaja, pues al
llegar a pandemia, ya no era la primera situación de contingencia que nos
enfrentábamos, por lo cual ya existían algunas capacidades para vivir dentro de
esta.
La respuesta del Estado venezolano para evitar la emergencia
sanitaria fue temprana, aunque ortodoxa, pues la cuarentena ha sido la fórmula
magistral, con acciones cuyos contenidos, que podemos caracterizar en palabras
de Gonzalo Basile (2021); como “experimentales, ambiguos, empíricos,
individualizantes, higienizantes, biomedicalizados, microbiologizadas, totalizantes,
excepcionalmente securitizados”.
La pandemia del Covid-19 tuvo su expresión en lo político, pues generó unas expectativas en relación a un inminente colapso del sistema sanitario venezolano, que se encuentra en un proceso de precarización. Esto no ocurrió, pues a pesar de las deficiencias del Sistema Nacional de Salud Pública, este ha atendido a más del 98 % de los casos diagnosticados.
Este argumento buscó generar presión por la vía de la
descalificación de la gestión del gobierno bolivariano. En este periodo el chavismo políticamente
avanzó y su oposición se dividió más, lo que permitió avanzar en la elección de
un nuevo parlamento. La fantasía de un sector opositor al chavismo, de creerse
titular de un gobierno se diluyó y a fecha los reconocimientos formales van a
la baja.
El desafío en Venezuela sigue siendo el mismo, que antes de
la pandemia normalización económica, solo que sigue siendo una tarea compleja,
ya que se debe realizar en un escenario de incremento de las medidas
coercitivas unilaterales y de decrecimiento de la economía mundial, aunque sin
oposición sólida a lo interno y una creciente alianza con sectores del capital
privado nacional y transnacional.
Nuevamente el asunto de los derechos humanos como campo en
disputa.
La expresidenta chilena, Michelle Bachelet, que ahora ocupa
el cargo de Alta Comisionada para los DDHH de las Naciones Unidas, declaró en
una nueva actualización de su informe sobre los Derechos Humanos en Venezuela,
que se preocupada por las denuncias que continúa recibiendo su Oficina, sobre
las supuestas ejecuciones extrajudiciales por parte de los cuerpos de seguridad
del Estado venezolano.
En el mismo discurso solicitó la excarcelación de personas
que según el criterio del organismo, están detenidas de manera
“arbitraria”. Ante estas declaraciones,
las primeras declaraciones desde el gobierno bolivariano, fueron las del
embajador venezolano ante Naciones Unidas en Ginebra, Héctor Constant, quien
sostuvo que el seguimiento que hace el Consejo de Derechos Humanos de
Venezuela, es producto de una decisión tomada por un grupo de países
"violadores" de los derechos humanos.
Aseguró que las observaciones de Bachelet "carecen de
equilibrio", reflejando informaciones que no han sido verificadas y que
son producto de campañas de medios internacionales de prensa contra Venezuela.
Las declaraciones de Bachelet, se basan en informe
cuestionado por el gobierno bolivariano, que fue realizado por la Misión
Internacional Independiente de Determinación de los Hechos sobre Venezuela, que
está a cargo de Marta Valiñas. Vale decir que los miembros de esta Misión no
son reconocidos por el gobierno bolivariano, por lo cual no han visitado
Venezuela y sus afirmaciones se basan en fuentes secundarias.
Este nuevo escenario de tensión se desarrolla luego de un
encuentro Bachelet y el presidente Maduro hace un par de semanas, donde está
destacó los progresos en el trato a los detenidos en Venezuela, especialmente
un mejor acceso a la atención médica, y expresó su confianza en que aumente la
cooperación entre su oficina y el Gobierno de Nicolás Maduro.
La Asamblea Nacional en
En cuanto a la dinámica legislativa, se puede observar en
una primera instancia un énfasis en el diálogo político, de cara a las próximas
elecciones regionales y locales, en este marco podemos ubicar el llamado del
presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Jorge Rodríguez, a encontrarse
"a todas y a todos los partidos de la oposición". En esta misma
línea, se encuentran siendo analizadas por una comisión parlamentaria, las
postulaciones para rectores del Consejo Nacional Electoral, que se estima sea
nombrado para la primera semana del mes que viene.
En función de lo establecido en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, los diversos titulares de los poderes públicos han presentado su informe de gestión ante la Asamblea Nacional, en esta oportunidad fue el Contralor General Alfredo Ruiz. Quien sostuvo que durante el 2020 se realizaron 153 mil acciones pertinentes para la defensa de los Derechos Humanos, asimismo reportó que atendieron a unas 120 mil personas y 97 mil recibieron formación en esta materia.
Breves:
• A partir
del 8 de marzo de 2021, todo ciudadano venezolano que se encuentre en una
situación migratoria irregular, en territorio de los Estados Unidos de América
tendrá 180 días para solicitar el Estatus de Protección Temporal. Un mecanismo
que no es una visa regular, por lo tanto, no otorga un camino a la residencia
permanente en los Estados Unidos, pero provee estadía legal y permiso de
trabajo. Pasado ese período el gobierno estadounidense decidirá si la situación
en Venezuela continúa siendo “peligrosa”, como para extender el programa. Se
estima que esta medida afecte a más de 320.000 venezolanos que se encuentran en
ese país.
• La Fuerza
Armada Nacional Bolivariana Venezolana han venido ejecutando ejercicios
militares, en las ocho Regiones Estratégicas de Defensa Integral en las que se
organiza el país en el ámbito militar.
El propósito es desplegar al personal militar de todos los componentes
para probar capacidades en la tarea de garantizar la soberanía, la
independencia y la integridad territorial del país.
• El
canciller Jorge Arreaza, rechazó las declaraciones de su homóloga sueca, Ann
Linde, quien expresó su respaldo al opositor Juan Guaidó. El diplomático
venezolano expreso que es lamentable que la democracia sueca, apoye planes y
personajes creados por Washington para destruir la democracia venezolana y
repita literalmente el guion de Donald Trump.
• Guaidó no
descartó participar en conversaciones con representantes de Noruega, como
mediadores. Analistas políticos estiman que “el equipo de Noruega está
utilizando el método de negociación denominado “pendular”, de conversaciones
por separado con el gobierno venezolano, el de EEUU y los distintos sectores de
oposición”.
• Juan González, director de Asuntos Hemisféricos de la Casa Blanca, informó que no van a sostener negociaciones con Venezuela sobre los puntos en disputa entre los dos países. González plantea un diálogo entre el Gobierno y el G4, al tiempo que señala: “Maduro y también Guaidó están mal en las encuestas”.
jesusalbertorondon@gmail.com
Es un buen análisis ya que resume en una breve síntesis los puntos cruciales de la situación actual de la República Bolivariana de Venezuela: Por ejemplo, en las Breves, menciona la actividad que despliega la FANB Venezolana como custodio de la soberanía territorial, la cual han venido realizándose en las ocho Regiones Estratégicas de Defensa Integral Nacional a objeto de -cito- "para probar capacidades en la tarea de garantizar la soberanía, la independencia y la integridad territorial del país", en un momento en que se nos está atacando, además del brutal bloqueo económico, desde la vertiente del Sol naciente venezolano, El Esequibo, en busca de darle, con el apoyo del imperialismo colonialista, otro zarpazo a nuestro territorio, pero que esta vez "no pasarán" sin que paguen caro su osadía. Si algo nos devolvió el comandante Chávez, fue el sentimiento de amor por la Patria, el cual había sido enajenado por los gobiernos entreguistas de la llamada Democracia representativa. Ahora nuestros jovenes saben por qué se alistan en el servicio militar, y no como antes, que salían huyendo de la recluta. Gracias por compartir.
ResponderEliminar