Por Rubén Darío
“Según la ONU, la educación es un derecho de todas las
mujeres y los hombres, ya que nos proporciona “las capacidades y conocimientos
críticos necesarios para convertirnos en ciudadanos empoderados, capaces de
adaptarse al cambio y contribuir a la sociedad”. La educación además está
protegida en la Declaración Universal de Derechos Humanos, y reconocida como uno
de los cinco derechos culturales básicos.”. Ana Palacio. Ser Padres.
Quise copiar esta introducción en este artículo de reflexión a propósito del día de la juventud y su relación específica con la Educación Superior y la situación actual en muchos países con esta pandemia, la juventud y los gobiernos de turno. No me referiré a las fortalezas, debilidades, oportunidades o amenazas en muchos de estos países en relación a este tema, pero si a Venezuela en forma muy general y sin entrar en detalles de estructura, forma y fondo de la Educación Superior, casi entendida o relacionada con estudios Universitarios de diferente modalidades y niveles. Con carreras diversas, pensum, currículo, estratos, oficiales, privadas, técnicas entre otras variantes. Es un tema extenso con múltiples variables a analizar, desde el sistema político o ideología existente de sus gobernantes hasta sus propósitos a futuro con diversos objetivos a interpretar o analizar.
Tenemos una nueva “Asamblea Legislativa” legal o ilegal, que
tiene que legislar y ordenar los desastres en la Educación Superior, aunque en
los otros estratos educativos esta casi en las mismas condiciones. Porque no es
la cantidad de institutos, matricula estudiantil o carreras lo que es
importante, es la calidad, capacidad de su profesora, estudiantes, recursos
académicos de todo tipo y sus resultados lo que dan el visto bueno en esta
materia a nivel nacional e Internacional.
La juventud que quiere estudiar en la educación superior
tiene que estar preparada desde el nivel del preescolar hasta el bachillerato,
y es aquí donde empiezan la fallas de esa juventud, que sería muy largo
analizar factores como desnutrición, deficiencia en la calidad de algunos
maestros, desmotivación por varios factores y entre estos la falta de buenos
salarios a los maestros para no imaginarme en estos momentos de pandemia y crisis sociopolítica
las consecuencia a corto plazo o la vuelta de la esquina lo que está pasando y
va a seguir pasando si no se detiene este problema actual.
Donde la emigración, el abandono de estudio de carreras
universitarias se está dando en esta juventud, no se diga de los profesores y
resto de personal del sector universitario. No quiero pensar” pero ya me paso
por mi imaginación” que la ideología implantada por el Socialismo del Siglo XXI
desde hace 22 años, su propósito sea un pensamiento único, una estatificación o
un dominio de la educación a estilos retrógrados de regímenes opresores. Sin
educación de calidad y diversificada no hay revolución que valga y no hay progreso.
En eso la juventud tiene que estar clara y luchar hasta vencer por sus
derechos.
No es la huida de un país el que lo salvara del desastre
educativo en que estamos, donde faltan comedores, transporte, becas, recursos
de todo tipo, con tecnología atrasada; con jóvenes que han interrumpido sus
estudios y carreras, emigrado y no han seguido sus estudios y pare de contar
situaciones particulares y personales de cada familia en Venezuela.
La Educación Superior y sus protagonistas, como muchas otras
situaciones tiene que hacer un giro reflexivo y no retorico y protagonista por
los jóvenes de este Milenio, empezaron con una ilusión que ha sido frustrada
por una política estatista y dosificada que no transcendió en sus bueno fines y
por muchas variables. Actualmente las medidas económicas, las sanciones, la
pandemia, el gobierno y sus gobernantes han fracasado en materia de Educación,
Salud y calidad de vida de venezolano de a pie.
Esta narrativa corta se pudiera alargar en cada uno de los
factores de este fracaso educativo, pero cada uno de los jóvenes estudiantes,
padres, gobierno y miembros de la sociedad sabe lo que tiene que hacer, para no
perder más tiempo en un tema que en el primer párrafo de este articulo lo
precisa. Salto adelante JUVENTUD.
Transciendan y no se quede en la “nada”. J.P. Sartre.
rdlchez@gmail.com
No se queden en la nada...Despertar y a caminar y así se hace un camino. No hay tiempo que perder
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