Por Iván Oliver Rugeles:
Con el mayor estupor leímos el artículo del asiduo
colaborador de Ensartaos y de Aporrea, Cécil Gerardo Pérez, titulado “¿Qué pasa
con el rector de la Universidad “Simón Bolívar?” (
https://www.ensartaos.com.ve/que-pasa-con-el-rector-de-la-universidad-simon-bolivar/),
a través del cual nos hace saber que en ese centro de estudios universitarios,
que no es privado, que es del Estado, se practica, y, al parecer con enorme
“aceptación” y hasta respaldo hacia lo interno del mismo, la segregación
racial. Tanto lo es así, que causó revuelo e irritación al por mayor, la
designación como Vice Rector Académico de la Universidad, por parte del Consejo
Nacional de Universidades y luego de la renuncia de su titular, del profesor,
Dr. Luis Holder, hecho ocurrido en julio de 2017, simple y llanamente porque su
piel es negra…
Tal designación, nos narra Pérez, “generó reacciones
negativas y campañas de agresiones lideradas por el rector (transitorio),
Enrique Planchart, y gremios docentes y estudiantiles, en el seno de la universidad
USB”, lo cual, para nada, causó mella alguna en Holder, quien asumió sus
responsabilidades y en ellas ha estado desde hace más de un año y medio.
Pero resulta que ahora, nuevamente, ha retornado el revuelo,
o el “pandemónium”, como lo califica Pérez en su escrito, pues quienes tienen
secuestrado por años ese recinto universitario, al considerarlo bastión para el
exclusivo usufructo de la llamada “sociedad civil” clasista, y supremacista, no
toleran hoy que el profesor Holder haya asumido en calidad de “Encargado”, la
máxima Rectoría de esa Casa de Estudios, debido a la ausencia temporal -por razones médicas-, de
su titular, el Dr. Enrique Planchart, no obstante las abultadas certificaciones que lo acreditan como
profesional y como docente de primera línea, obtenidas tanto en universidades
del país, como del exterior.
Cuenta C. G. Pérez, que a lo interno de la Universidad se ha
desatado una feroz campaña de descrédito, muy agresiva contra Holder, que
incluye amenazas verbales y hasta físicas, la cual ha venido soportando de
manera sosegada, estoica…
También agrega el articulista, que, ante esa situación, el
actual ministro del Poder Popular para la Educación Universitaria, César
Trómpiz, ha declarado, entre otras cosas, que: “un desconocimiento por razones
políticas externas de esta designación temporal por ocasión sobrevenida, por
parte de factores internos crean las condiciones para que se desarrollen
situaciones irregulares que pueden llevar a consecuencias inimaginables
totalmente fuera de la legalidad vigente”.
Visto el cuadro que nos narra el amigo Cécil Gerardo Pérez,
observamos que allí las autoridades ejecutivas del país, encabezadas por el
camarada Trómpiz, han quedado demasiado cortas en su actuar, ante este inaudito
caso de segregación racial y odio visceral, por el sólo hecho de que un ser
humano, de piel negra, como lo és el Dr. Holder, quien reúne con creces -lo reiteramos-, suficientes condiciones
académicas para ejercer esa rectoría, haya asumido dicha responsabilidad…
¿Qué vaina es esa?
¿No estamos acaso en Venezuela, donde por tradición, y más
aún, por mandato constitucional, y porque -además- estamos construyendo una
Revolución Socialista, todos los nacidos en su territorio somos iguales y
donde, además, no se admite bajo ninguna premisa, la segregación, de la
naturaleza que fuere?
Este caso hay que tomarlo muy en serio. Manifestaciones
racistas no deben ser toleradas, y menos aún, vistas como si se tratara de un
problema menor. Es un asunto sumamente grave lo que viene sucediendo en la
Universidad Simón Bolívar, con el Dr.Holder, de acuerdo a lo que nos cuenta el
articulista Pérez.
Frente a este caso, hay que “tomar el toros por los cachos”,
como se dice en criollo y de inmediato denunciar estos repudiables hechos ante
la Defensoría del Pueblo, la Fiscalía General de la República y la Comisión de
Derechos Humanos de la ANC, pues esta embestida asquerosa de esos grupos
elitistas y fascistas, por numerosos que pudieran ser en esa Casa de Estudios,
en contra el Dr. Holder, porque su piel es negra, hay que pararla en seco. Y
quienes resultaren responsables directos de su diseño y puesta en práctica,
deben ser sometidos a la justicia. Para ello, nuestra Patria cuenta con la
novísima “Ley Constitucional Contra el Odio, por la Convivencia Pacífica y la
Tolerancia”, que bien serviría de sustento legal para juzgar y sancionar.
La citada Ley, veamos, tiene por objeto, según lo prescribe
en su artículo primero: “contribuir a generar las condiciones necesarias para
promover y garantizar el reconocimiento de la diversidad, la tolerancia y el
respeto recíproco, así como para prevenir y erradicar toda forma de odio,
desprecio, hostigamiento, discriminación y violencia, a los fines de asegurar
la efectiva vigencia de los derechos humanos, favorecer el desarrollo
individual y colectivo de la persona, preservar la paz y la tranquilidad
pública y proteger a la Nación.”
(https://albaciudad.org/2017/11/este-es-el-contenido-de-la-ley-contra-el-odio-por-la-convivencia-pacifica-y-la-tolerancia/)
Y, para quien incurra en su violación, la propia Ley en su
Artículo 20, dispone: “Quien públicamente o mediante cualquier medio apto para
su difusión pública, fomente, promueva o incite al odio, la discriminación o la
violencia contra una persona o conjunto de personas, en razón de su pertenencia
real o presunta a determinado grupo social, étnico, religioso, político, de
orientación sexual, de identidad de género, de expresión de género o cualquier
otro motivo discriminatorio, será sancionado con prisión de diez a veinte años,
sin perjuicio de la responsabilidad civil y disciplinaria por los daños
causados.”
De manera que, -por favor-,
y nos dirigimos a las más altas autoridades del país: este caso no puede
despacharse como si fuese un asunto menor, de poca importancia, con una
declaración simplista, repudiando tales conductas. Hay que ir al fondo del
problema, de manera que los Estamentos del Estado a los que corresponda, actúen
sin contemplación alguna con quienes pretenden imponer en el país, prácticas perversas
propias de regímenes de inspiración nazi-fascista.
Lo que hoy está sucediendo en Bolivia luego del
derrocamiento de su Presidente Constitucional, Evo Morales, donde se ha
desatado una de las más horrendas razias en contra de sus pueblos originarios,
es una muy clara advertencia de lo que las clases de la oligarquía y sus
cipayos que nunca faltan, tanto de ese país como en el resto de países de la
región, ya vemos que han decidido avanzar para la toma del poder, por la vía
que fuere, con el único objetivo de reinstalar en cada uno de ellos, gobiernos
dóciles al servicio del imperialismo yanqui y de nuevo someter a nuestros
pueblos, tal cual lo hicieron por años durante el pasado siglo XX, por lo que
esas manifestaciones racistas tenemos que verlas como evidentes anticipos de
esos planes. De allí que tenemos el deber ineludible de enfrentarlas sin
dilación alguna, sin pausa y mediante la aplicación de la mencionada Ley contra
el odio, ¡¡¡con la mayor severidad…!!!
rioliverr@gmail.com
INCREIBLE PERO EXISTE LA DISCRIMINACION RACIAL-EN ESTE SIGLO EN EVOLUCION.-
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