miércoles, 8 de mayo de 2019

Se derrotó la asonada militar, pero el plan conspirativo sigue en marcha



Por Juan Martorano:
Lo ocurrido el pasado martes 30 de abril de 2019, en la que un grupo de militares y efectivos del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN) se apostaron en el Distribuidor Altamira de la ciudad de Caracas, con armas de guerra de alta potencia, al lado de Juan Guaidó y el nuevo prófugo de la justicia venezolana, Leopoldo López, hay que verlo mucho más allá de la operación comunicacional tendientes a concretar un quiebre institucional y de los mandos dentro de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, de los cuerpos de seguridad ciudadana y de los cuerpos de inteligencia. Hay que verlo mucho más allá.


Pese a no contar con la suficiente cantidad de efectivos y el poderío militar suficiente, desplegar un ataque nada más y nada menos que a la Base Aérea “Generalísimo Francisco de Miranda”, en lo que popularmente se conoce como La Carlota, que funge como sede de la Comandancia General de la Fuerza Aérea venezolana, y que allí se encuentren ubicados importantes helicópteros que prestan apoyo logístico importante al Ejército Bolivariano, forjador de libertades, y el aeropuerto Caracas, desde donde se despliegan importantísimas operaciones por parte de algunas aeronaves, con transmisión por parte de varias cadenas de noticias a nivel internacional, hubiese tenido dentro de la batalla simbólica, un impacto de consideración, que podría haber inclinado la balanza del bando de las fuerzas sediciosas e insurreccionales contra el orden constitucional.

Ya algunos buenos analistas han señalado y comparado dicho evento con el del “Tanquetazo” de Chile de junio de 1973. En su debida oportunidad, este servidor quien esto escribe lo hizo debidamente. No obstante, se obvia en esa consideración el carácter de casta que rige dentro de las Fuerzas Armadas chilenas, cosa que no ocurre dentro de la FANB venezolana por su origen eminentemente popular.

Sin embargo, soy de los que sostiene que una parte del plan golpista y desestabilizador fue impactado considerablemente en su potencia (por lo menos en lo que al aspecto militar se refiere) pero no por ello derrotado. El 30 de abril de 2019, a mi juicio, marcha otra fecha de inflexión como lo fueron el 15 de abril de 2013; el 12 de abril de 2014 y el 6 de abril de 2017, cuando se iniciaron por parte del oposicionista fascista oleadas de terrorismo y de violencia que buscaban el derrocamiento del presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros.

En ese sentido, es que me permito transcribir una información obtenida de acuerdo a una cadena de whatsapp, por parte de algunos “patriotas cooperantes”, que pueden indicarnos que es lo que se nos podría venir en las próximas horas y días por venir, por lo que debemos prepararnos para las nuevas arremetidas desestabilizadoras por parte de los traidores y traidoras a la Patria de Bolívar y Chávez.
El mensaje a transcribir es el siguiente, reservándome algunos datos, a fin de preservar la fuente de la misma:
“… Información recibida, revisada y confirmada.
Se están realizando reuniones en casas de líderes de base de partidos radicales de oposición para fines de coordinación de acciones a realizar el día viernes 03 y sábado 04 del presente mes en curso, se comienza a reestructurar la denominada “Resistencia Civil”, siguiendo patrón de las protestas violentas del año 2014 con la variante de que esta vez serán células integradas por 25 o menos individuos, con la finalidad de evitar capturas, desde el mes de febrero se inició el retorno de los integrantes originales de estos grupos con capacitación recibida en Colombia para ejecución de ataques individuales y en grupo, la finalidad de estos grupos está dividida de la siguiente forma:

1.- Micro- células: 5 integrantes serán para ejecución a sitios emblemas para el gobierno nacional, sedes del Psuv y partidos aliados, casas de líderes de base y líderes regionales de la revolución.
2.- Macro- células: estas ejecutarán ataques y defensa en marchas opositoras a organismos de seguridad y todo aquel grupo que sirva para la defensa de la Revolución y sus diferentes representantes.

En dichas reuniones se les está informando a estos grupos radicales que en los próximos días contarán con grupos armados de respaldo y seguridad para enfrentar cualquier tipo de agresión armada de los organismos élites de la dictadura (faes, Conas, bae) y colectivos revolucionarios que salgan en agresión a sus protestas o líderes.

También se tocó el punto de que entre los siguientes días a más tardar el día lunes 06 de mayo 2019 el gobierno de los estados unidos estará dando un anuncio importante sobre acciones militares conjuntas para lograr la liberación del país que será la señal para que comiencen los ataques directos a sedes de alcaldías y gobernaciones revolucionarias.

En dicha reunión también se tocó el tema de originar caos en el sector eléctrico y distintos servicios públicos ya que quedó demostrado que fue la única forma de alzar al pueblo humilde y de bajos recursos, acciones que se llevarán a cabo en estados claves para alzamientos como lo son: Zulia, Táchira, Miranda, Distrito Capital, Lara, Aragua. El objetivo es el caos total y la anarquía para colapso total del estado y perturbación total de la paz de la patria”.

A ello habrá que agregar la emboscada a efectivos militares en el sector La Guacamaya en el estado Aragua, específicamente en el municipio Zamora de dicha entidad federal, con el correspondiente saldo de soldados caídos, y que advertirían sobre el accionar de bandas criminales de la delincuencia paramilitarizada, activadas en el marco de este plan. Al igual que la caída de un helicóptero de la Guardia de Honor Presidencial en el sector el Volcán (colindante entre los municipios El Hatillo y Baruta del estado Miranda) y que casualmente era escolta de otro donde se trasladaba el presidente de la República, Nicolás Maduro, a los ejercicios militares con las diferentes academias de la Universidad Militar Bolivariana escenificados en el Pao, estado Cojedes.

No pretendo impulsar teorías de la conspiración ni la paranoia. Pero ante el estado de cosas y la ocurrencia de eventos que han venido suscitándose en el país, necesario es iniciar investigaciones con respecto a estos dos últimos eventos. Y extremar las alertas en la población.

Así las cosas, en estos momentos en la Patria de Bolívar y Chávez.
¡Leales siempre! ¡Traidores, nunca!
¡Bolívar y Chávez viven, y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen!
¡Hasta la Victoria Siempre!
¡Independencia y Patria Socialista!
¡Viviremos y Venceremos!

jmartoranoster@gmail.com

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