Por Rolando Prudencio Briancon:
Para no ser otro pirata como los ingleses, debo reconocer
que fue un WhatsApp de una compañera consecuente de lucha revolucionaria de los
Ayllus Urbanos de La Paz, Lilian Ergueta quien me dio pie a pensar que la
piratería inglesa vino ahora por nuestro litio.
Y es que los bolivianos más allá del frenesí electoral deberíamos reflexionar respecto a lo que han sido dos hechos dentro nuestra memoria larga y también la corta -siguiendo la sapiencia de Zabaleta- para comprender que más allá de cualquier pertenencia política, somos los bolivianos quienes hemos sido víctimas del robo y pillaje de la piratería británica.
Desde luego que para no volver nuevamente incurrir en otro
caso de piratería de mi parte, debo reconocer que no todos los ingleses son de
ese ladronesco linaje; existen otros como el periodista británico Matt Kennard
quien, como un impertivo categórico, según otro connotado pensador inglés como
fue Emanuel Kant, ha denunciado: “Cuatro meses después del derrocamiento de
(Evo) Morales, que el nuevo régimen -se refiere al de Añez- estaba organizando
una serie de nuevas iniciativas con el Reino Unido como socio
estratégico", para la explotación de nuestro litio.
Ha sido esta revelación periodística la que ha generado un
revuelo diplomático, por cuanto el embajador de Gran Bretaña Jeff Glekin ha
negado -otro vicio del ladrón- señalando: "No hemos tenido ningún
involucramiento en ninguna situación contra la democracia de Bolivia. Negamos
todas estas acusaciones del artículo que hemos visto, y he hablado muy francamente
con el canciller".
Esta inconfesable intención de los ingleses de apropiarse de
nuestro litio se vio truncada por la voluntad del pueblo boliviano que
democráticamente sacamos a los golpistas en octubre del año pasado, que ya
tenían tratos adelantados con el gobierno inglés para que ellos exploten
nuestro estratégico y valiosísimo recurso.
Según la investigación periodística referida, el gobierno del Reino Unido declaró que la tecnología de baterías de litio es una prioridad para su estrategia industrial”; en junio de 2019, anunció que estaba invirtiendo 23 millones de libras esterlinas en “desarrollo de baterías para automóviles eléctricos”.
El Reino Unido apunta a tener una industria de baterías próspera y sostenible, lo que se traduciría en una oportunidad de £ 27 mil millones de euros y muestras de asociaciones bilaterales que son esenciales para garantizar esto” señala un estudio de sustitución de energías fósiles.
Abundando en la investigación referida señala del periodista
Matt Kennard que: Un proyecto cofinanciado entre 2019 y 2020 buscaba “optimizar
la exploración y producción de litio en Bolivia (en los salares de Coipasa y
Pastos Grandes) utilizando tecnología británica”.
Después del golpe, este proyecto avanzó rápidamente y fue
autorizado por su principal financiador, el Banco Interamericano de Desarrollo
(BID), el 25 de noviembre de 2019, dos semanas después del golpe y días después
de las masacres de Sacaba y Senkata.
El proyecto obtuvo la aprobación total para un
financiamiento de $us 100.000, semanas después, a mediados de diciembre de
2019. El periodista dijo también al portal web Declassified que: “La
implementación de las actividades (de la subvención) se realiza en estrecha
coordinación con las autoridades gubernamentales designadas y sus equipos
técnicos”. En ese momento su “estrecha coordinación” habría sido con el régimen
de Añez, concluye la nota periodística.
Fue Karl Marx quien dijo que la historia se repite dos veces, una como tragedia y otra como farsa; y lo que pasó durante la INVASIÓN y posterior guerra del Pacífico fue una tragedia, y lo que hoy se pretendía consumar iba a resultar otra tragedia para los bolivianos, después de que entre los golpistas malnacidos y los pillos piratas de siempre de los ingleses nos intentaron arrebataran nuestro litio, no prosperó.
Fue entonces que este despojo quedó como Farsa luego que los fascistas fueron derrotados democráticamente por el pueblo boliviano, quien es el único dueño del litio; pero también de hacer su propia historia, y ya no repetirla como tragedia, ni como farsa; sino como dueños soberanos de nuestros recursos.
rolandoprudenciobriancon@gmail.com
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